El consejero de Sanidad, Jesús Fernández, ha defendido que el objetivo del Gobierno autonómico de cara a terminar la legislatura es mantener las listas de espera por debajo de las 100.000 personas y sacar a finales del 2018 la Ley que marcará los tiempos máximos.
Así lo ha asegurado en una entrevista concedida a Europa Press, donde también ha hablado sobre el desfase entre la cifra de pacientes en lista de espera que ofrece el Ministerio de Sanidad y las que mensualmente ofrece el Gobierno regional. El consejero ha explicado que los datos ofrecidos por el Ministerio corresponden al mes de junio y los regionales son de noviembre.
«Además el Ministerio solo informa de la lista de espera quirúrgica porque es el único dato que maneja de todas las regiones. Solo tres comunidades publicamos las listas de cirugía, consultas externas y pruebas diagnósticas», ha indicado.
Aunque esa respuesta no parece convencer mucho a la oposición, que siguen pidiendo una empresa independiente la que audite las listas. Una petición que el Gobierno regional no parece estar muy por la labor, porque el consejero ha precisado que la mejor auditoria es la que hace la población, y que Castilla-La Mancha ya está auditada por el ministerio que dirige Dolors Monserrat y es una auditoria externa «estupenda». «La mejor».
En cuanto a las continúas críticas del PP en este asunto, tras acusarles de ir aumentado el dato de «forma caprichosa», ha afirmado que no quiere entrar en la polémica ni debe porque «a la ciudadanía no le interesa».
Aunque lo cierto, es que a los castellano-manchegos sí les preocupa, al menos cuando les dan cita para visitar a un especialista con meses de retraso.
NO QUIERE DAR CIFRAS
«Dar una cifra con la que queremos terminar la legislatura sería un error. Hay un grupo de trabajo de profesionales y gestores dedicado a la lista de espera y queremos sacar a final de este año la ley de tiempos de demora máxima donde se van a marcar los periodos. Ese será el objetivo con el que queremos acabar la legislatura. Mantener por debajo de 100.000 personas la lista de espera sería lo ideal», ha dicho el responsable regional de Sanidad.
«Durante seis meses consecutivos las listas de espera están por debajo de los 100.000 y también disminuye cualitativamente los tiempos de espera: en cirugía oncológica ha bajado 16 días, en cardiaca 91 días, se espera 36 días menos en consultas externas, 41 menos en técnicas diagnósticas y 13 días menos en quirúrgica. Me quedo con esos números y el resto es querer hacer política alarmista que es a lo que se dedican», ha agregado en referencia a los ‘populares’.
Respecto a las listas de espera en cirugía menor ha asegurado que «su idea» es «no publicarlas» porque el Ministerio del ramo no trabaja con este parámetro. «No me importa que se informe porque es algo público, pero distorsionaríamos la comparativa con el resto de comunidades. Lo he hablado con el Ministerio y me ha dicho que no hace falta», ha añadido.
DERIVACIONES
En conversación con Europa Press, y después de que la expresidenta regional, María Dolores de Cospedal, haya acusado al actual Ejecutivo de frenar la buena evolución del descenso de lista de espera por paralizar las derivaciones a clínicas de Madrid, ha apuntado que Cospedal eligió un cambio de modelo de gestión sanitaria que pasaba por derivar a clínicas privadas, paralizar las infraestructuras, no comprar tecnología y despedir a profesionales.
«Ahora el Tribunal de Cuentas le ha dicho lo que le tenía que decir y ella ha contestado verdaderamente lo que hacía, contradiciendo lo que piden los de su partido en las Cortes», ha indicado el consejero, quien ha añadido que «es cierto. Derivamos a clínicas de Castilla-La Mancha la mitad. A 3.800 pacientes quirúrgicas al año, mientras ellos llegaron a derivar a 8.000», ha manifestado, para agregar que el actual Ejecutivo «no deriva porque están explotando a la sanidad pública, fomentando el trabajo en red».
Fernández ha terminado recordando que los datos de las derivaciones se entregan trimestralmente a los grupos con representación en las Cortes regionales. «En ellos se aprecia cero derivaciones a consultas externas, la mitad en cirugía y entre un 12 y un 14 menos en pruebas», ha sostenido.
MEDIDAS DE CONSOLIDACIÓN
En cuanto a los proyectos que su departamento tiene previstos hasta el 2019, el consejero ha vuelto a aludir a la Ley de Garantías de Atención Sanitaria Especializada del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, «que el año que viene puede estar siendo tramitada», y al Decreto que regulará el derecho a una segunda opinión médica, que «va a tener la luz al final del primer semestre de 2018», así como retomar la Ley de Consumo, que cuenta con una partida exclusiva en los presupuestos de 2018.
Entre sus objetivos se cuela también el Plan de Salud Mental, que a principios del 2018 irá a Consejo de Gobierno, eximir del pago de los medicamentos a las familias de las personas con discapacidad que tengan una renta inferior a los 18.000 euros, así como ampliar a los adultos los parches para diabéticos, que ahora se experimenta en niños.
«Este año y medio que queda –para finalizar legislatura– es el de la consolidación. Seguir con obras, seguir comprando tecnología, seguir haciendo las Ofertas de Empleo Público, incrementando el número de especialistas que formamos. Esta comunidad necesita consolidar profesionales y las estructuras porque estamos rodeados de regiones muy potentes. A iguales condiciones que Madrid, porque a la gente le tira Madrid, por desgracia», ha concluido.
EL VIAJE A CHICAGO
De otro lado, y tras las críticas del PP por el viaje que el pasado mes de noviembre realizó junto con el presidente regional, Emiliano García-Page, a Chicago, para asistir a la Asamblea Científica y Congreso de la Sociedad Radiológica de América del Norte (RSNA), ha defendido que el Ejecutivo autonómico está «a las puertas» de tener que decidir la tecnología con la que equipar tanto los nuevos centros de salud como los hospitales en construcción.
«Acudimos para ver la tecnología que creemos deben tener. Allí no se va a comprar. Hemos hecho contactos y esta semana los técnicos del Sescam están manteniendo ya reuniones con las empresas», ha explicado el consejero .
«Al PP no le gusta que invirtamos en tecnología. Esas vergüenzas se les ve mucho. Castilla-La Mancha estaba la última en todo y nuestro Plan de Renovación de Tecnología, dotado con 28 millones de euros, más los 15 millones del mecenazgo de la Fundación Amancio Ortega, que nos viene como anillo al dedo, nos está permitiendo renovar» ha dicho.
En otro orden de cosas, y después de que el PP haya avanzado su intención de pedir el certificado de inclusión del director general de Recursos Humanos, Íñigo Cortázar, en las listas de espera para demostrar que se trata de un «claro ejemplo enchufismo» y que el Gobierno regional ha mentido en este asunto, el responsable regional de Sanidad considera que los ‘populares’ se «equivocaron muchísimo», pues cree que «al ciudadano no le interesa esta polémica».
«Este paciente se ha decidió irse a Cuenca y ha esperado más que el resto de los pacientes porque tuvo otro proceso que no le permitió operarse antes. Ha tenido más espera que cualquier otro paciente de este tipo de cirugía», ha concluido