UGT Castilla-La Mancha valora de manera negativa los últimos datos sobre siniestralidad laboral relativos a los nueve primeros meses de 2021, unos datos hechos públicos este martes por la Consejería de Economía, Empresa y Empleo de Castilla-La Mancha y que ponen de manifiesto un incremento del 21,5% de estos accidentes y, lo que resulta más grave para el sindicato, un nuevo aumento del índice de incidencia en la región.
Según señala el sindicato en nota de prensa, de enero a septiembre de 2021 se contabilizaron un total de 20.466 accidentes, 3.626 más que en el mismo periodo de 2020, «un importante incremento que tiene su explicación en el parón económico que hubo el año pasado con motivo del Covid-19».
Frente a este aumento de los accidentes, el secretario regional de Salud Laboral de UGT, Javier Flores, denuncia que lo verdaderamente preocupante es que el índice de incidencia de la región ha vuelto a crecer y lo ha hecho en un 15,9%, y «eso a pesar de que Castilla-La Mancha viene siendo la comunidad con mayor índice de incidencia de todo el país».
Para el responsable de Salud Laboral, la siniestralidad laboral se ha convertido «en una auténtica lacra de nuestro mercado de trabajo, con cifras inasumibles para las que pedimos medidas urgentes y contundentes»,
Los accidentes laborales han crecido sobre todo entre los asalariados (+22,9%) –mucho más que entre los autónomos (+8%)–; y en mayor proporción entre las mujeres, un 28,2%, frente al incremento del 19,1% de los hombres.
Por sectores, «es significativa la subida de la siniestralidad en Servicios (+26,7%) y en Industria (+19,4%)». Los accidentes también subieron en Construcción, un 17,3%, y en Agricultura, un 7%, «un incremento este último que contrasta con los datos de afiliación del sector y es que aquí apenas ha variado la cifra de trabajadores y trabajadoras inscritos en la Seguridad Social».
La actividad en la que más subió la siniestralidad fue en la sanitaria, un 78,5%, algo que explicaría el aumento de los accidentes entre las mujeres.
22 PERSONAS HAN PERDIDO LA VIDA EN SUS PUESTOS DE TRABAJO
Según estas últimas estadísticas de la Junta de Comunidades, de enero a septiembre 22 trabajadores y trabajadoras han perdido la vida en el trabajo, 18 menos que en el mismo periodo de 2020. También han bajado los accidentes graves, pasando de los 164 que hubo el año pasado a los 170 del presente ejercicio. Donde ha habido un considerable aumento ha sido en los leves, que han crecido un 21,9%.
También crecieron de manera sustancial los accidentes in itinere, un 46,5%, frente al 19,8% de aumento de los accidentes en jornada.
Desglosando la estadística de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo, se aprecia que la siniestralidad aumentó en mayor medida en Ciudad Real, un 25,3%; seguida de Toledo y Albacete, con un 21,2% cada una de ellas; Cuenca, con un 20,5%; y donde menos en Guadalajara, con un 18,4%, «porcentajes todos ellos -no obstante- que resultan muy elevados».
«HACE FALTA MÁS CULTURA PREVENTIVA»
Para el secretario regional de Salud Laboral de UGT es urgente romper con esta tendencia al alza de la siniestralidad de la región. «Castilla-La Mancha no pude seguir liderando este triste ranking». Por ello defiende la necesidad de implementar en las empresas una verdadera cultura preventiva.
Implantar la figura del delegado territorial de prevención, para mejorar así la salud laboral de aquellas empresas a las que no llega ni la Inspección de Trabajo ni la protección de los sindicatos de clase; incrementar la plantilla de inspectores de Trabajo; y acabar con la excesiva precariedad y temporalidad de nuestro mercado de trabajo son otras demandas que el sindicato considera imprescindibles.
