El concejal de Bienestar Social, José Manuel Fernández, ha presentado esta mañana en rueda de prensa el inicio del curso escolar del Servicio de apoyo y seguimiento socioeducativo para reducir el absentismo y el fracaso escolar.
Por tercer año consecutivo se da inicio a un proyecto en el que todos los agentes sociales están implicados, “con la intención de seguir avanzando tras los buenos resultados obtenidos los años anteriores”, explicaba Fernández.
Se trata de un proyecto integral “donde cada agente actúa con un enfoque distinto pero con el mismo fin de poder integrar nuevamente en el sistema educativo a los menores que presenten absentismo o fracaso escolar”, y estará coordinado por la educadora social de los Servicios Sociales, complementada por la trabajadora social de los Servicios de Integración, que junto al concejal velarán “para que este proyecto obtenga los resultados esperados y vuelva a cumplir los objetivos marcados.”
Estos objetivos son, entre otros, contribuir a la mejora de la calidad de vida de los menores y sus familias, apoyar y favorecer su proceso de aprendizaje académico, personal y social, estimular su interés por el aprendizaje dentro del centro escolar reforzando su proceso de socialización y, fomentar hábitos de alimentación saludables.
Para la consecución de estos objetivos, a parte de la coordinadora y las trabajadoras sociales, se va a contar nuevamente con un equipo “de gente joven, cualificada y con muchas ganas de trabajar” que estará integrado por una trabajadora social, dos maestros y tres animadores de actividades juveniles.
Al igual que el año pasado, este programa se va a desarrollar en las instalaciones del Centro Socioeducativo, y se va a extender desde el 1 de octubre hasta el 31 de julio de 2019. Dentro del programa se ofrecerán los servicios de comedor y refuerzo escolar, y este año entre las novedades se va a atender a más usuarios (de los 40 habituales se incrementan hasta 50) y se van a añadir actividades dos sábados al mes.
Fernández ha subrayado que este proyecto, que se retoma tras las vacaciones de verano, comenzará a trabajar con más fuerza “después de los éxitos conseguidos el curso pasado”, unos buenos resultados que se han constatado tanto en las entrevistas con los padres y madres, centros educativos e incluso pediatras. Entre las mejoras logradas en los usuarios destacan el aseo personal e higiene bucodental, regularidad de la asistencia a los centros educativos, implicación en las tareas y atención en las aulas y en casa, mayor implicación de los padres en el proyecto, lo que ha permitido “que hayan recuperado hábitos que habían perdido, no sólo en el Centro sino también en casa.”
Fernández ha agradecido, finalmente, “su implicación en el proyecto y su incansable esfuerzo” a todo el departamento de Servicios Sociales.
