La Audiencia Provincial de Almería acoge este miércoles el juicio contra dos hombres acusados de un presunto delito contra los derechos de los ciudadanos de extranjeros después de que supuestamente trataran de pasar hasta la Península a un ciudadano marroquí indocumentado, para lo que habrían habilitado un hueco en el motor de su furgoneta antes de embarcar hacia el puerto de Almería desde Melilla.
Durante el juicio, el fiscal tiene previsto pedir cuatro años de prisión para un hombre de 51 años y vecino de Hellín (Albacete), y para otro joven de 29 de Cáceres por su presunta participación en los hechos descritos.
El Ministerio Público sostiene que los acusados «tuvieron que modificar algunas piezas del motor» para que el polizón «pudiera esconderse» en el hueco antes de embarcar, de forma que el inmigrante quedaba situado junto al propio motor «con el consiguiente peligro de calentamiento y causación de quemaduras e inhalación de gases tóxicos».
Asimismo, la Fiscalía señala que la modificación efectuada en la furgoneta Nissan modelo Vanette preveía el cierre del capó desde el interior del vehículo «sin que desde el hueco pudiera abrirse»; circunstancias que, junto con el resto de condiciones del viaje hecho para evitar «eludir» el paso fronterizo, «no impidieron a los acusados facilitarle escondrijo en el vehículo».
LO TRAÍAN DESDE ÁFRICA
La Fiscalía ahonda además en que los acusados tenían conocimiento de la situación «irregular» del inmigrante, quien iba provisto de una chapa de plástico sobre la que se asentaba en el hueco del motor, cuando iniciaron su viaje el 3 de enero del pasado año desde el norte de África.
Cabe recordar que fueron los agentes de la Sección de Especialistas Fiscales del Puerto de Almería que realizaban diferentes controles con motivo del desembarque de los buques con destino a Almería procedentes del norte de África los que hallaron agazapado al polizón e identificaron a los acusados, que eran el conductor del vehículo y su acompañante.