La Guardia Civil detuvo el pasado 27 de julio a un camionero en el kilómetro 78 de la autovía A-2 que estaba «poniendo en grave peligro la seguridad vial» y sextuplicaba la tasa de alcohol permitida.
Según ha recogido el instituto armado en un comunicado, los agentes vieron frenar bruscamente a varios vehículos para evitar colisionar «ante la conducción negligente» de un camión, que realizaba cambios bruscos de carril sin señalizar, no manteniendo la distancia de seguridad y poniendo en grave peligro la seguridad vial.
Una vez interceptado el vehículo articulado en cuestión, se procedió a identificar al conductor que evidenciaba síntomas claros de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
Tras ser sometido a las pruebas, arrojó un resultado de 0,97 mg/l en aire espirado en la primera prueba, y 0,86 mg/l en la segunda, multiplicando por seis la tasa permitida para este tipo de conductores (0,15 mg/l).
Acto seguido se procedió a su detención como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, y a su puesta a disposición judicial.
Conducir superando las tasas legalmente establecidas constituye un delito contra la seguridad vial previsto en el art. 379 del Código Penal, pudiendo ser condenado el conductor a una pena de prisión de tres a seis meses, multa de seis a doce meses o de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
