La Policía Nacional ha detenido en el municipio malagueño de Fuengirola a una pareja que habría estafado, supuestamente, al menos a un centenar de personas a través de una tienda online de moda que captaba clientes a través de una conocida red social. Una de estas estafas se hizo a un ciudadano de Albacete, que llegó a transferir 35.000 euros para sumarse al negocio.
El fraude, que ha dejado víctimas en buena parte del país, llevó a los investigados a embolsarse unos 50.000 euros en beneficios. Para ello, los sospechosos ofertaban prendas de creación propia, bisutería e incluso productos de estética que nunca llegaban a los compradores, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
La estafa media ronda entre 50 y 100 euros, aunque en uno de los casos denunciados, un ciudadano de Albacete fue convencido para sumarse como socio al negocio, transfiriendo 35.000 euros a una cuenta bancaria relacionada con los arrestados.
La operación Bombón, llevada a cabo por agentes adscritos a la UDEV de la Comisaría Local de Fuengirola, se inició en el último trimestre del año 2021, aunque la actividad delictiva de los investigados se remontaría a mediados del 2020.
Los presuntos responsables de la trama, un hombre y una mujer, de 38 y 47 años, ambos con múltiples antecedentes por delitos contra el patrimonio, operaban desde una tienda online de moda. Aprovechaban el tirón de una popular red social para darse a conocer y captar clientes. Para ello, los investigados anunciaban sus productos con vídeos en directo, ofertando ropa de creación propia, bisutería y hasta productos de estética a precios muy atractivos.
Tras llegar a un acuerdo para la compraventa de los productos, los clientes realizaban el pago a través de Bizum, no recibiendo nunca los efectos que adquirían. Muchos de los casos ni siquiera fueron denunciados a tenor del bajo importe de la estafa, una media de entre 50 y 100 euros.
La pareja investigada había creado, además, otro modus operandi paralelo consistente en la captación de colaboradores o socios. Hacían creer a sus seguidores que estaban ante una actividad comercial en expansión y muy rentable. Hay varios afectados en esta segunda variante de estafa, destacando el caso de un ciudadano de Albacete que llegó a transferir 35.000 euros a los supuestos defraudadores para sumarse a ellos como empresario.
Según las pesquisas, los sospechosos eliminaban los comentarios públicos de sus perfiles en redes sociales donde les acusaban de estafadores, amenazando a los que se atrevían a denunciarles.
Los investigados vivían desde hacía un tiempo en un domicilio ocupado en la localidad fuengiroleña, habiendo hecho de la estafa y la ocupación de inmuebles su forma de vida, según los agentes encargados del caso.
En un registro en el domicilio de los investigados, los agentes intervinieron dinero, armas simuladas, documentación, un vehículo y soporte informático. Los arrestados han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Fuengirola en funciones de guardia.