El Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2019 repartirá este domingo 22 de diciembre un total de 2.380 millones de euros en premios, lo que supone la misma cantidad que el año pasado, y los agraciados con el ‘Gordo’ recibirán 400.000 euros al décimo.
El segundo premio ascenderá a 1,25 millones de euros por serie (125.000 euros al décimo) y el tercero será de 500.000 euros a la serie (50.000 euros al décimo). Además, como el año anterior, habrá dos cuartos premios de 200.000 euros (20.000 euros al décimo) y ocho quintos de 60.000 euros (6.000 euros al décimo). También habrá 1.794 premios de 100 euros al décimo.
Este año se han puesto en circulación 170 millones de décimos en los 11.000 puntos de venta de la red comercial de Loterías y Apuestas del Estado, y la emisión consta de 170 series de 100.000 billetes cada una. Así, la emisión total asciende a 3.400 millones de euros, de los que un 70 por ciento se destina a premios (2.380 millones de euros).
LA «MAGIA» DEL SORTEO
En la presentación del sorteo de 2019, el presidente de Loterías, Jesús Huerta, para quien este será su segundo sorteo al frente de la empresa pública, aseguraba que la «magia» de este evento le sigue «sorprendiendo» y causando «admiración», y agradecía a todos los profesionales se SELAE, a los delegados comerciales, puntos de venta y asociaciones su trabajo porque, gracias a él, se puede mantener «esta entrañable tradición».
Huerta explicaba que este sorteo tiene que ver con los «recovecos más íntimos de sentimientos compartidos», con la memoria colectiva de ilusión y esperanza de la Navidad, con los recuerdos de los padres y los abuelos, con «símbolos mágicos» como la cantinela del sorteo, los bombos o el anuncio, que da «el pistoletazo de salida» a la Navidad.
De este modo, reivindicaba el valor de compartir que va unido a este tradicional evento. «Un amigo de Sabadell puede compartir un décimo con nosotros porque coincidimos en las vacaciones en Sanlúcar de Barrameda o una compañera de trabajo puede traerme un décimo del pueblo de su abuela», argumentaba el presidente, que subrayaba que el sorteo «no tiene ni fronteras sociales ni fronteras territoriales, algo muy positivo en este momento para la sociedad y la convivencia».