La hostelería en Castilla-La Mancha experimenta una creciente internacionalización de su fuerza laboral. Más del 30% de los trabajadores del sector tienen origen extranjero o doble nacionalidad, concretamente el 28,7% son extranjeros y el 4,1% cuentan con doble nacionalidad, según un informe elaborado por Randstad Research a partir de datos del INE.
Castilla-La Mancha, por encima de la media nacional
En Castilla-La Mancha, el 67,1% de los empleados en hostelería son únicamente españoles, un dato que sitúa a la región por encima de la media nacional (58%). No obstante, el informe advierte de una tendencia a la baja en todo el país respecto a la presencia de trabajadores exclusivamente españoles, que han descendido en 13.000 personas desde 2019.
En palabras de Virginia Román, responsable de cuentas estratégicas de hostelería de Randstad, “la hostelería fue una de las actividades económicas más golpeadas por la pandemia del Covid-19, pero se ha recuperado con fuerza y ha superado el nivel de ocupación que tenía antes de la crisis sanitaria”.
Aumento de la ocupación impulsado por extranjeros
La presencia de trabajadores extranjeros y con doble nacionalidad ha sido clave para el crecimiento del empleo en hostelería en los últimos cinco años. En el conjunto del país, la ocupación en el sector ha aumentado un 7,4%, alcanzando los 1,84 millones de empleados. Durante este periodo, los trabajadores exclusivamente españoles han pasado del 67% al 58% del total, mientras que los empleados extranjeros y con doble nacionalidad han ganado nueve puntos porcentuales, alcanzando el 42%.
El peso de los trabajadores extranjeros ha crecido especialmente en regiones como Baleares (37,8%), Comunidad Valenciana (37,6%) y Cataluña (37,1%). Madrid lidera el ranking con un 40,6% de extranjeros y un 19,9% de trabajadores con doble nacionalidad, siendo la comunidad más internacionalizada del sector.
Relevo generacional y retos del sector
El informe también destaca un problema estructural: el envejecimiento de la plantilla. Casi la mitad de los empleados en hostelería tiene 45 años o más, tanto en servicios de alojamiento (49%) como en los de comidas y bebidas (45%). Esta situación obliga al sector a reforzar la captación de talento extranjero y joven para asegurar el relevo generacional.
Román subraya que “hay vacantes de camareros, cocineros y camareros de piso que realmente cuestan cubrir, sobre todo en temporada alta y en aquellos destinos con más actividad”. Ante este panorama, las empresas están adoptando medidas como la mejora salarial, la conciliación laboral y el desarrollo profesional para atraer y fidelizar talento.
Formación y futuro del empleo
Para hacer frente a estos desafíos, el 31% de los trabajadores del sector recibirá formación hasta 2030 para actualizar competencias, y un 19% lo hará para cambiar de especialización. Además, el empleo femenino sigue siendo mayoritario, con un 54,3% de mujeres empleadas al cierre de 2024.