El metro cuadrado de la vivienda nueva en Castilla-La Mancha se situĂł en 1.538 euros y descendiĂł un 1 por ciento y el esfuerzo para comprarla -la renta disponible necesaria de un hogar para afrontar el pago de una hipoteca- es del 40 por ciento, 9 puntos por debajo de la media nacional, segĂșn datos del Ășltimo informe de Tinsa sobre ‘Vivienda de Obra nueva 2025’.
En Castilla-La Mancha, el precio de la obra nueva es de promedio un 53 por ciento mĂĄs cara que la de segunda mano.
A nivel nacional, el esfuerzo teĂłrico para comprar una vivienda nueva se sitĂșa en el 49 % en el caso de la vivienda nueva, un porcentaje considerado crĂtico, y que supone 13 puntos porcentuales mĂĄs que la media (36 %).
Esto se debe a que el precio de la obra nueva es de promedio un 44 % mĂĄs cara que la de segunda mano, ya que el metro cuadrado de la primera cerrĂł en 2024 a 2.528 euros, mientras que la vivienda usada alcanzĂł los 1.750 euros.
En el Ășltimo año se ha producido un repunte del precio de la obra nueva, que creciĂł un 4,7 % en valor real (7,6 % si se tiene en cuenta la inflaciĂłn), mientras que en la segunda mano avanzĂł un 1,2 % en valor real (4 % valor nominal).
De esta manera, desde el mĂĄximo de 2008, la vivienda de obra nueva se ha revalorizado un 10 % en valor nominal, aunque ha caĂdo un 21 % si se descuenta la inflaciĂłn.
AdemĂĄs, el esfuerzo teĂłrico de compra en el segmento de la vivienda de obra nueva se sitĂșa por encima del 35 % de la renta disponible media en todas las comunidades autĂłnomas, a excepciĂłn de La Rioja, mientras que excede el 50 % de la renta disponible media en las regiones de Baleares, AndalucĂa, Extremadura, Madrid y Cataluña.
Desde Tinsa prevén que el precio de la vivienda siga subiendo ante la escasez de la obra nueva, debido a que el ritmo de construcción estå siendo «limitado», aunque estiman que la construcción crecerå, pero de manera «insuficiente» para hacer frente a las necesidades de vivienda, impulsada por la creación de nuevos hogares y la compraventa por parte de extranjeros, sobre todo no residentes.
«El reto en 2025 y en los próximos años consiste en solventar las dificultades que estå afrontando actualmente la construcción para ampliar el parque residencial a un tamaño que sea coherente con lo actualmente necesario en aquellas zonas donde hace falta. Estos problemas estån asociados a la generación de suelo, a largos procesos administrativos y a la escasez de mano de obra», ha expuesto la directora del Servicio de Estudios de Tinsa, Cristina Arias.
COSTAS Y POLOS DE EMPLEO REGISTRAN CRECIMIENTOS DE PRECIOS MĂS ALTOS
Por zonas, los incrementos de precios en obra nueva mĂĄs elevados se registraron en puntos de costa cantĂĄbrica y mediterrĂĄnea y en los polos de empleo mĂĄs activos, como Madrid, Barcelona o MĂĄlaga, sobre todo en sus ĂĄreas metropolitanas.
Sin embargo, los precios de obra nueva mĂĄs elevados se encuentran en los polos de empleo y en las zonas de fuerte atracciĂłn turĂstica. AsĂ, las ubicaciones que exceden los mĂĄximos alcanzados durante la burbuja de 2007 se sitĂșan en la costa mediterrĂĄnea. En Baleares, el precio fue en valor real un 19% mĂĄs alto que durante el ‘boom’, mientras que en los municipios de MĂĄlaga y Benidorm fue un 2% mĂĄs elevado.
De igual manera, Marbella y Santa Cruz de Tenerife se alinean con el mĂĄximo de sus series, aunque sin llegar a rebasarlos. «Son todos municipios con un alto porcentaje de demanda turĂstica», ha subrayado Arias.
LOS VISADOS DE OBRA NUEVA RESURGEN EN ZONAS SECUNDARIAS
Los visados de obra nueva se han concentrado sobre todo en los polos de empleo, focos turĂsticos y en ubicaciones secundarias con planes de crecimiento multisectorial.
En estos Ășltimos cinco años, destacan por su volumen los principales polos de empleo en Madrid y Barcelona, zonas de turismo de playa, como Alicante, Murcia y Baleares, y luego aquellas zonas que han hecho una apuesta hĂbrida entre estos dos modelos, como MĂĄlaga, Valencia y CĂĄdiz.
Respecto al ciclo anterior -los Ășltimos cinco años con respecto a los cinco previos- destaca el crecimiento de los visados en zonas secundarias con capacidad de ofrecer empleo, como Sevilla, Pontevedra, Valladolid, Vizcaya o Zaragoza.