La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Toledo juzgará este miércoles, 8 de mayo, a J.F.M., acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa y otro de lesiones por intentar disparar con una escopeta a los regentes de un bar de Miguel Esteban que habían discutido con su mujer, por lo que el Ministerio Fiscal pide para él una pena de ocho años de cárcel.
Según el escrito de la Fiscalía, los hechos tuvieron lugar el 15 de diciembre del 2020, cuando el procesado, J.F.M., tras comunicarle su esposa, L.P.C., que había tenido una discusión con M.A. y D.A., regentes de un café-bar de Miguel Esteban (Toledo), cogió una escopeta de su propiedad y varios cartuchos y se dirigió a dicho bar con la mencionada escopeta cargada.
Cuando el acusado entró en el bar se encontró de frente detrás de la barra a M.A., a la cual encañonó con la escopeta con ánimo de darle muerte o aceptando que este resultado pudiera producirse, al tiempo que decía «os voy a matar», sin que pudiera dirigir el disparo hacía ella ya que en el momento de apretar el gatillo se abalanzó sobre él D.A. agarrando el cañón de la escopeta desviándolo hacía abajo, de modo que el disparo impactó en el suelo del establecimiento.
Tras esto se inició un forcejeo entre el procesado J.F.M. y D.A. y su hijo de 17 años de edad, E.D.A., los cuales agarraban de la escopeta al primero el cual, en el transcurso de dicho forcejeo, con ánimo de menoscabar su integridad física, propinó diversos golpes a D.A. quien , ayudado por su hijo, agarrando la escopeta que asía el procesado J.F.M., lograron arrastrarlo hacía la puerta del establecimiento, donde se produjo un segundo disparo durante el forcejeo, impactando las postas en el techo, las cortinas, un tablero de madera, y el televisor del establecimiento, consiguiendo finalmente arrebatarle la escopeta fuera del local F.J.G.P.
Como consecuencia de estos hechos M.A. sufrió una crisis de ansiedad aguda, para cuya sanidad precisaron una primera asistencia facultativa consistente en ansiolíticos y 2 días de curación con perjuicio moderado, mientras que D.A. sufrió laceraciones superficiales en la cara, laceración leve con sangrado y tumefacción en la zona frontoparental derecha, enrojecimiento ocular izquierdo, para cuya sanidad precisaron una primera asistencia facultativa y tratamiento médico quirúrgico consistente en grapas de sutura y analgesia, así como 10 días de curación, 2 con perjuicio moderado y 8 con perjuicio básico.
A casusa de estos hechos el establecimiento bar, regentado por M.A. y D.A. sufrió daños en el suelo, el techo, las cortinas, un tablero de madera y el televisor del establecimiento, que han sido tasados pericialmente en 690 euros.
El procesado J.F.M. fue detenido el 16 de julio de 2020 e ingresó en prisión provisional por auto de 17 de julio de 2020, permaneciendo en dicha situación hasta que fue puesto en libertad bajo fianza de 5.000 euros por auto de 19 de abril de 2022, estando obligado a no aproximarse a M.A. ni a D.A., sus lugares de trabajo, residencia o cualquier otro frecuentado por ellos, prohibición de comunicarse con aquellos, así como la prohibición de acudir y residir en el término municipal de Miguel Esteban (Toledo).
Por todo ello, la Fiscalía pide para el acusado una pena de ocho años de prisión, siete por el delito de homicidio en grado de tentativa y otro más por un delito de lesiones.
