Este fin de semana las temperaturas serán inferiores a lo normal para la época, hasta 10 grados menos en el norte del país, previo paso a una próxima semana, en la recta final de septiembre, que arrancará con calor y un «veranillo de San Miguel más corto y menos intenso que en años anteriores».
Así lo ha explicado este viernes el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) Rubén del Campo, tras informar de que la borrasca Aitor que ha sacudido el norte del país y especialmente Galicia en las últimas jornadas se aleja ya «definitivamente» del territorio español aunque todavía se notarán hoy «sus últimos coletazos».
En las últimas horas, las acumulaciones por lluvia han sido superiores a los 150 litros por metro cuadrado en zonas como el oeste y sur de Galicia.
Se han registrado además rachas de viento huracanadas, por encima de 120 km/h en zonas de alta montaña de la mitad norte, según el portavoz de la Aemet.
En el área mediterránea en las últimas horas los vientos, que han sido cálidos, han disparado por allí las temperaturas; de hecho, ayer, jueves, se alcanzaron hasta 36º en localidades de las provincias de Alicante y Murcia.
Para este viernes, según el portavoz de la Aemet, la borrasca Aitor que ya se aleja del territorio español todavía se dejará sentir en el extremo norte peninsular, con lluvias, viento y mala mar en el Cantábrico, con olas de hasta cuatro metros.
Las precipitaciones serán hoy de hasta 40 litros por metro cuadrado en doce horas en la vertiente cantábrica de Navarra y en el litoral de Gipuzkoa (País Vasco).
Estas zonas han activado la alerta amarilla (riesgo para ciertas actividades) que también mantiene la provincia de Tarragona (Cataluña), en la zona del litoral y prelitoral, por vientos de hasta 80 kilómetros por hora además de temporal marítimo.
La situación de mala mar y alto oleaje mantiene en alerta amarilla además este viernes a la región de Andalucía y a las comunidades cantábricas.
De cara al fin de semana, según las predicciones de la Aemet, las temperaturas serán en general bajas, de 5 a 10 grados inferiores incluso a lo habitual para estas fechas en algunas zonas de la mitad norte.
En capitales del norte peninsular como Lugo (Galicia), y también en León y Palencia (Castilla y León) y asimismo en Soria los termómetros bajarán de los 5 grados a primeras horas de la mañana del sábado.
La previsión para mañana es de estabilidad en general pese al descenso térmico, aunque podrían darse algunas lluvias en el cantábrico oriental, alto Ebro y Pirineos, además de nieve en esa cordillera por encima de 1.600 metros.
Ya entre el domingo y el lunes las temperaturas subirán «de forma clara», de modo que a principios de la próxima semana pasarán a valores «por encima de lo habitual», sobre todo el martes y el día anterior, de acuerdo a las predicciones.
Quizás podamos hablar para entonces, tras las jornadas frescas del fin de semana especialmente el sábado, de un «veranillo de San Miguel corto, no tan intenso como el de años anteriores», ha explicado Rubén del Campo.
De hecho, el lunes podrían registrarse más de 25º en amplias zonas del país, incluso más de 30º en comunidades del sur como Extremadura y Andalucía, y más de 32º en el Valle del Guadalquivir.
Para el martes parece que se iniciaría un descenso de las temperaturas, según las predicciones, pero todavía podrían superarse los 30 a 32º en el Valle del Guadalquivir y en puntos del sureste peninsular.
El paso de un frente por el país para entonces dejaría lluvias en Galicia, noroeste de Castilla y León y también en las comunidades cantábricas, según apuntan las predicciones de la Aemet.