Tras más de 40 días de confinamiento, el alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha tenido palabras de ánimo para todos sus vecinos, y dentro de lo malo también tiene tiempo para pensar en positivo y llama a sacar lecciones de la situación experimentada en la ciudad, dando por hecho como sociedad, se saldrá de este episodio «con una conciencia social mucho mayor».
En términos generales y pese a lo «duro y complicado» de la situación, ha celebrado el «respeto» de sus vecinos en lo que llevamos de cuarentena, aunque reconoce que «estar tantos días en casa pesa en el ánimo» y hay que ir «racionalizando» las sensaciones.
Desvela que de todas estas semanas ha habido momentos especialmente duros, recordando como cuando más virulenta se volvió la epidemia perdieron la vida muchos amigos y conocidos.
Eso derivó en días «muy complicados», y al margen de que todos los días aumenta el cómputo general de muertos, en lo personal le ha tocado de cerca en varias ocasiones lo peor de esta estadística. «Son situaciones complicadas que nos están afectando a todos. Es una cantidad grande de fallecimientos y nosotros, que somos un pueblo grande, nos conocemos todos».
Ahora confía en que se vaya acercando la solución al confinamiento como primer punto de partida para enfilar la recuperación, aunque no es optimista en cuanto al progreso de recuperar la rutina, ya que «no va a venir de un día para otro».
«Tendrá que ser progresivo. Nos darán instrucciones a la hora de volver a la vida normal, pero intuyo que va a tardar. Se alargará el confinamiento y cuando salgamos habrá barreras que ir superando día tras día. No podremos salir todos en desbandada, como nos gustaría», ha agregado.
«LA SOCIEDAD VA A SER DISTINTA»
El primer edil conquense da por hecho que la sociedad que salga de este tránsito será distinta a la que se encerró en casa el 14 de marzo.
De sus conciudadanos, ha querido destacar y agradecer los grandes gestos de solidaridad que ha podido constatar desde el Ayuntamiento, ya que en todos los llamamientos impulsados desde la Casa Consistorial se ha cosechado una gran respuesta por parte de los conquenses.
Así, ha puesto el acento en cómo la ciudad se ha volcado sobre todo con el Hospital Virgen de la Luz y sus profesionales cuando peor lo han estado pasando por el pico asistencia.
«Con cualquiera de las iniciativas que se han canalizado desde aquí hemos recibido una respuesta masiva. Hacían falta batas para os sanitarios y en dos días conseguimos todo el material y 200 personas voluntarias para coserlas», ha recordado Dolz.
MEDIDAS MUNICIPALES CONTRA LO QUE VENDRÁ
Como máximo regidor del Consistorio conquense, ha comprometido el trabajo municipal dentro de sus limitadas competencias para ayudar a los conquenses a recuperar poco la normalidad.
Como medidas de urgencia, ha recordado que ya se han aplazado y suspendido los pagos de algunos tribunos e impuestos y se han dictado sendos decretos con una batería de iniciativas orientadas a paliar los efectos del parón económico.
El equipo de Gobierno «continúa trabajando día a día con todos sus concejales» y espera que en próximas semanas, cuando se alivie la situación se puedan desplegar más políticas «para reactivar comercio, consumo y actividad».
Ahora, el objetivo primordial debe ser según su punto de vista aunar fuerzas desde todas las fuerzas políticas para «sacar a la ciudad de esta crisis», algo para lo que quiere contar «con todos los grupos políticos» para «ir de la mano».
Confía en que, del mismo modo que la sociedad saldrá reforzada en términos de solidaridad, esa ola llegue a nivel político. «Que esa solidaridad nos envuelva a todos».
«Dejemos las disputas y los discursos vacíos y estériles ante lo que nos va a demandar la ciudad. Hay que estar todos juntos, buscar soluciones, y confío en que los hechos irán demostrando que en el día a día y al recuperar la actividad plenaria se va a conseguir», ha deseado el presidente de la Corporación Local.
Por último, ha enviado un mensaje de ánimo a sus paisanos, pidiéndoles fuerza y dando el pésame a todo aquél que ha perdido a alguien querido en este trance.
«Vamos a salir de esta. Tendremos que arrimar el hombro para hacerlo, pero aquí en Cuenca si algo somos es solidarios», ha confiado Darío Dolz.