La Guardia Civil ha inspeccionado una finca de la localidad de Añover de Tajo en donde ha localizado un caballo que se encontraba mal alimentado, en malas condiciones higiénico sanitarias, y sin recibir atención veterinaria, lo que le podrÃa haber causado la muerte. Por estos hechos se ha tomado declaración al dueño de la explotación en calidad de investigado no detenido por un delito de abandono animal quedando el animal en su custodia con la obligación de que el equino reciba asistencia veterinaria.
El SEPRONA de la Guardia Civil de Illescas tuvo conocimiento gracias al aviso de un ciudadano de que en una explotación ganadera de la localidad de Añover de Tajo se encontraba un caballo en estado de extrema delgadez. Las investigaciones realizadas por el SEPRONA llevaron a identificar al dueño de dicha explotación, el cual cuenta con cuatro antecedentes por este hecho delictivo, asà como con una multitud de infracciones administrativas relacionadas con el bienestar animal, por lo que  realizó inspección de la citada explotación junto con un veterinario de la Unidad Técnica Ganadera de Toledo que constató que, efectivamente, el caballo referido se encontraba en estado de importante delgadez y que requerÃa asistencia veterinaria que no estaba siendo prestada
Asimismo, la Guardia Civil y el referido veterinario constataron que los boxes donde se hallaban el resto de caballos contenÃan gran cantidad de estiércol en su interior, y que el área donde se sacaban al exterior estaba cerrada por una valla metálica perimetral en muy mal estado, además de existir en dicha área multitud de residuos de chatarra, maderas y restos de obras, lo que unido a la falta de asistencia veterinaria prestada a los animales allà presentes suponÃa un grave riesgo para los mismos de enfermar o sufrir lesiones debido al abandono de su propietario.
La Guardia Civil tomó declaración como investigado no detenido a JFPG de 48 años como autor de un delito de abandono animal, y remitió las diligencias al Juzgado de Guardia de Illescas. El caballo quedó bajo custodia del propietario con la obligación de que el equino reciba asistencia veterinaria.
Por parte de la Guardia Civil, se tiene conocimiento que debido a esta actuación policial, una veterinaria puso en tratamiento al animal para acelerar el funcionamiento de su hÃgado, lo que corroboró la falta de atención sanitaria por parte de su propietario.