Una fotografía del Cautivo de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) ha servido como base para burlarse de la alcaldesa de Ciudad Real, la socialista Pilar Zamora, y de su apoyo a la Semana Santa ciudadrealeña, de la que incluso ha sido costalera, a la que han hecho un montaje subida en el trono de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Cautivo y María Santísima de la Estrella de la ciudad gaditana –con las potencias incluidas–.
El montaje, que se ha publicado en la web 12minutos.com, y se ha compartido casi 40.000 veces en redes sociales y a través de WhatsApp de cofrades de Ciudad Real quienes en su mayoría, y a través del presidente de la Asociación de Cofradías de la capital, Francisco Turrillo, ha condenado esta forma de actuar y de burlarse no sólo de la primera edil sino también de un sentimiento religioso.
Turrillo, que ha calificado la actuación de «broma de mal gusto» ha recordado a los cofrades ciudadrealeños que «no podemos olvidar el respeto y el diálogo, para lo que debemos ofrecer una imagen distinta a la burla» además de que ha asegurado que la Comisión permanente siempre mantendrá relaciones con el Ayuntamiento «desde la educación, el saber estar, la fraternidad y el sosiejo siempre ajeno a la falta de entendimiento».
LÁGRIMAS DE IMPOTENCIA
Por su parte, Pilar Zamora ha vivido uno de los momentos más complicados de su carrera política al tener que intervenir en la presentación del cartel de Semana Santa «porque es muy difícil hablar ante un auditorio que te va a poner en duda», aunque ha insistido que hay dos cosas que nadie podrá cuestionar a través de burlas: que es vecina de Ciudad Real desde que nació hace 47 años y lleva sus tradiciones en el ADN; que es cofrade y costalera por lo que sólo ha estado donde debía, debajo del paso «arrimando el hombro».
En este punto, la primera edil no ha podido evitar mostrarse visiblemente dolorida e incluso derramar lágrimas porque se haya hecho burla con algo que para ella es importante y por lo que ha seguido trabajando como alcaldesa «ya que el único interés del Ayuntamiento de Ciudad Real es engrandecer la Semana Santa y para ello, además de la subvención, ponemos a su disposición todo los servicios municipales». «Y este hombro que ha ido debajo de un varal nunca va a dejar de trabajar», ha afirmado.
APOYO DE LA IGLESIA
La Asociación de Cofradías de Ciudad Real no son las únicas que han mostrado su apoyo a la alcaldesa y han condenado esta falta de respeto, sino que también lo ha hecho el consiliario de las cofradías y sacerdote Fernando García-Cano, ya que hay que recordar que por un montaje similar -solo que en esta ocasión hecho por el propio protagonista y no por terceras personas- se ha condenado a un joven a una multa de 480 euros por ofensa de los sentimientos religiosos, aunque habrá que esperar si la hermandad gaditana presenta denuncia.
García-Cano ha lamentado esta actuación de cofrades «que se dedican a dar por saco, con perdón» y ha puesto de manifiesto «cuánto daño hace el falseamiento de las relaciones que se mantienen entre instituciones» completamente alejado de lo que son los valores cristianos que anteponen el amor al prójimo por encima de todo.
Finalmente, el consiliario de la Asociación de Cofradías ha pedido a la alcaldesa de Ciudad Real que no pida perdón por sus lágrimas sinceras al tiempo que le ha asegurado que están apoyándola «y con la institución a la que representa», como ella siempre ha estado al lado de la asociación.