El responsable de ACCEM en Castilla-La Mancha, Braulio Carlés, ha condenado de forma «irrevocable y taxativa» los atentados de Barcelona y Cambrils y ha lamentado el daño que además hacen a la comunidad musulmana que vive en España, y en este caso en Castilla-La Mancha «con normalidad».
«La mayoría de los musulmanes son gente de paz. Dicen que ellos son los primeros que sufren el terrorismo aquí y que se sienten como un sándwich porque están en medio», ha afirmado.
Por estas razones, Carlés asegura que muchos ellos tienen ahora «miedo hasta de salir a la calle» y «temen» que la población autóctona les pueda hacer daño.
El responsable de esta asociación de migraciones entiende el dolor de todas las familias que han perdido a alguien en esta tragedia «por parte de un grupo de descerebrados», pero pide a la sociedad en general trabajar conjuntamente en favor de la integración.
«No debemos dejarnos llevar por el odio porque así, ellos consiguen su objetivo», puntualiza en referencia a los terroristas.