El presidente del Partido Popular de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, ha subrayado este jueves la importancia del nuevo Estatuto de Autonomía como “la herramienta que sustentará el cambio de rumbo que necesita Castilla-La Mancha”, en una comparecencia ante los medios junto al alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares.
Ambos dirigentes han valorado el inicio del trámite parlamentario del nuevo Estatuto, que comenzó su andadura el pasado martes en el Congreso de los Diputados. Valverde ha querido dejar claro que el consenso alcanzado con el PSOE para presentar esta reforma no implica renunciar a la necesidad de un cambio profundo en las políticas que afectan a la región. “En el PP somos plenamente conscientes de que hace falta un cambio de modelo y de políticas que hagan una Castilla-La Mancha mejor en el futuro”, afirmó.
Cinco ejes para el cambio
Según explicó Valverde, la propuesta de Estatuto impulsada por el PP se apoya en cinco grandes ejes: la mejora de los servicios públicos, el impulso económico y del empleo, la garantía de igualdad territorial con una financiación justa, el diálogo social permanente y el compromiso con el campo y el mundo rural.
“Castilla-La Mancha está infrafinanciada y no pedimos ser más que otras, pero sí lo que es justo”, defendió. Además, reivindicó la necesidad de abordar el problema de la despoblación y de garantizar oportunidades “se viva donde se viva”, destacando el papel central del sector agroalimentario en la economía regional.
El agua, elemento clave
En relación con el agua, Valverde criticó duramente la gestión del PSOE y lamentó que “el Gobierno socialista no haya hecho lo suficiente, salvo victimizarse y buscar el enfrentamiento con otros territorios”. Frente a ello, recordó que las soluciones están recogidas en el Pacto Regional por el Agua, impulsado por el PP y firmado por el Ejecutivo autonómico. “Se han acabado los tiempos de lamentos y victimización, en ocasiones para obtener rédito político”, sostuvo.
Apoyo al liderazgo de Paco Núñez
El presidente provincial del PP elogió la postura del líder regional del partido, Paco Núñez, por su “seriedad y responsabilidad, a la altura del cargo que ocupa y del que aspira a ocupar”. Aseguró que este “cambio de rumbo” solo puede estar liderado por un Gobierno del PP, como ya ocurre, recordó, “en muchos ayuntamientos de la provincia de Ciudad Real y en la propia Diputación, donde la gente tiene la oportunidad de ver que hay otra forma de gobernar”.
Cañizares: “Castilla-La Mancha no puede seguir en el furgón de cola”
Por su parte, el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, destacó la “altura de miras” del PP y de Paco Núñez en un asunto que calificó de “vital para esta región”. Criticó que Castilla-La Mancha “se mantenga en el furgón de cola en muchos indicadores de desarrollo económico y social” y subrayó que el nuevo Estatuto debe servir para “garantizar y blindar los servicios a nuestros ciudadanos, posibilitando la modernización de esta tierra”.
Cañizares consideró “ejemplar” el trabajo del PP en esta reforma y reprochó al PSOE su papel en la financiación autonómica: “Castilla-La Mancha no puede dejar pasar más tiempo sin afrontar decisiones tan importantes como el agua, los servicios públicos o una financiación justa”.
“Un periodo de esperanza y de futuro”
El primer edil concluyó su intervención destacando el papel protagonista del PP en este proceso y aseguró que “se abre un período de esperanza y de futuro” con un partido que, aunque en la oposición en la región, gobierna en buena parte de las entidades locales y está “comprometido con el futuro de esta tierra”.
Ambos dirigentes coincidieron en que el nuevo Estatuto debe marcar un punto de inflexión y convertirse en una herramienta útil para resolver los grandes retos de Castilla-La Mancha, con un enfoque centrado en la gestión eficaz y en el interés general.

