El vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, ha afirmado este lunes que es «imposible» la pretensión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de acabar la legislatura, algo que ha visto «harto difícil y complejo». «No vamos a pasar el otoño próximo sin que haya convocatoria de elecciones», ha vaticinado.
Así se ha pronunciado Caballero en su intervención en el II Foro de la Asociación Club Conecta ‘Castilla-La Mancha, una mirada de futuro’ donde ha apuntado, no obstante, que es una decisión que le corresponde al presidente del Gobierno. «No me puedo poner ni en su pellejo ni en sus zapatos».
Como secretario provincial del PSOE en Ciudad Real, Caballero también se ha referido al momento por el que está pasando su partido, para reconocer que «es un mal momento» para los socialistas y afirmar que le «duele» tanto este hecho como los «presuntos corruptos» de su partido.
Me «duele», ha dicho, «como ciudadano y como responsable público institucional y miembro de un gobierno que sabe la importancia que supone no perder la confianza de la ciudadanía en las instituciones como consecuencia de la corrupción; además de como dirigente y militante socialista al ver mi partido muy deteriorado en su imagen como consecuencia de unos presuntos corruptos que tuvieron una confianza que no merecían», ha sostenido en declaraciones a los medios tras su intervención.
Pese a ello, y en referencia a la manifestación convocada por el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, este domingo en Madrid, Caballero ha reprochado a los ‘populares’ que quieran obtener una ventaja política. «A mí no me gusta el tú más porque a mí me duelen los corruptos del PSOE y quien más reprocha la corrupción del PSOE sin duda somos los que nos sentimos socialistas»
«En el PP no están precisamente como para dar ejemplos, sino todo lo contrario. De manera que harían bien el PSOE y el PP en asumir que tienen que tomarse muy en serio todo lo que significa la lucha contra la corrupción y lograr establecer un clima que permita recuperar la confianza de la ciudadanía en las instituciones», ha argumentado.
En este sentido, ha lamentado que quienes se están beneficiando de esta situación son los extremismos, por lo que ha afirmado que se está produciendo «un deterioro» de la democracia, «que ojalá y no tengamos que arrepentirnos algún día», ha añadido.
ESTATUTO DE AUTONOMÍA
Caballero ha sido preguntado también por el Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha, en tramitación en el Congreso, para destacar el hecho de que los dos grandes partidos «llamados a gobernar en España y Castilla-La Mancha lo hayan consensuado y lo vayan a aprobar definitivamente con todo el respaldo, solvencia y legitimidad».
En este punto, ha calificado de «incomprensible» el papel de Vox en este asunto, a quien ha acusado de actuar como «un caballo de Troya», al cobrar de las Cortes cuando su objetivo es «acabar con la autonomía». «No tiene ninguna lógica porque a Castilla-La Mancha le ha ido mucho mejor con la autonomía que dependiendo del centralismo y de Madrid».
En todo caso, Caballero ha afirmado que el Estatuto «no está en tela de juicio» ni cabe posibilidad de que no salga adelante «por la aritmética parlamentaria», ya que con los votos favorables del PSOE y del PP, «es una mayoría suficiente como para que sea una realidad».
Por tanto, ha confiado en que antes del verano pueda estar ya aprobado y entre en vigor con el fin de que la ciudadanía pueda disfrutar «de esos derechos y esas oportunidades que abre a los hombres y mujeres de Castilla-La Mancha» con este nuevo texto.
FINANCIACIÓN
El vicepresidente segundo de Castilla-La Mancha también se ha referido a la financiación autonómica para afirmar que «es evidente» que no va a haber un nuevo modelo, ya que «es imposible» con la configuración que tiene el Parlamento ahora mismo.
Es por ello por lo que ha recordado que Castilla-La Mancha lleva desde 2014 en infrafinanciación y que son, por este motivo, entre 1.000 y 1.200 millones los que la Comunidad Autónoma deja de ingresar cada año, por lo que ha vuelto a incidir en el fondo de transición que, según Fedea, supondrían entre 3.000 y 3.200 millones para Castilla-La Mancha.
Por último, y preguntado si se ve como sucesor de Emiliano García-Page al frente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Caballero ha respondido que no, para afirmar que el jefe del Ejecutivo autonómico está ahora mismo «en su mejor momento político y personal».
«Yo, que tengo la oportunidad de viajar con él dentro y fuera de la región, veo cómo se le acerca la gente que le conoce y cómo le valoran y animan», ha apuntado, para mostrarse convencido de que «vamos a ir a las próximas elecciones liderando él y vamos a obtener un magnífico resultado».



