Los grupos de la oposición al completo del Ayuntamiento de Cuenca no han dado su aprobación al convenio de Servicios Sociales de la Junta de Comunidades, al no obtener la aprobación de una mayoría cualificada de 13 votos, tal y como ha advertido este martes durante la sesión el alcalde-presidente, Ángel Mariscal. El Grupo Municipal Popular y sus 10 concejales ha votado a favor de este documento, lo que no ha sido suficiente para aprobar dicho convenio, ya que los tres grupos de la oposición se han abstenido.
La oposición ha basado su abstención en lo que consideran un condicionado del equipo de Gobierno al expresar su intención de seguir negociando y pidiendo a la Junta la financiación del 100% del convenio, ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
En el transcurso de la sesión plenaria, el alcalde y el concejal de Atención a las Personas, José María Martínez, han puesto de manifiesto el «grave perjuicio» que la no suscripción del convenio va a generar en los usuarios de estos servicios que viene prestando el Ayuntamiento durante ocho meses sin financiación alguna de la Junta.
El concejal ha explicado que el convenio rechazado supone una cuantía de 1,5 millones de euros entre la aportación de la Junta de Comunidades y el Ayuntamiento, y ha señalado que contempla la pérdida de 30.000 euros en el Plan Local de Integración Social (PLIS). En cuanto a la proporción de lo aportado por cada institución, la Consejería de Bienestar Social y el Ministerio aportarían el 55% y el Ayuntamiento el 45%; en relación con la prestación de la ayuda a domicilio, la proporción contemplada es del 76/24 del coste hora, proporción no real, ya que el Ayuntamiento ha subido la hora a 14 euros y no a 12,40 que es lo que fijaba el convenio, lo que supone un incremento de 129.000 euros. En total 159.000 euros más.
El nuevo convenio, que no ha podido ser aprobado y que necesitaba pasar por el Pleno al haber cambiado sustancialmente respecto a los anteriores, establece una vigencia hasta el 31 de diciembre de 2022 con posibilidad de prórroga por un período de hasta cuatro años, teniendo efectos económicos desde el 1 de enero de 2017, dado el carácter de continuidad del servicio que se presta.
Además, se señala en la cláusula decimocuarta que con carácter anual se procederá a actualizar el importe de los convenios mediante un anexo, en el que se establecerán las cuantías actualizadas para cada ejercicio, «estando sujeto a la condición en cada ejercicio de existencia de crédito».
El concejal de Atención a las Personas e Igualdad ha manifestado que la abstención de los tres grupos de la oposición «tendrá consecuencias muy negativas» para los usuarios a los que atiende el Ayuntamiento y que con esta postura el PSOE e Izquierda Unida «han demostrado que no creen en los Servicios Sociales». «MANIOBRA» DE «ABSOLUTA VERGÜENZA»
Por su lado, el Grupo Municipal Socialista ha calificado de «absoluta vergüenza» la actitud del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cuenca en el Pleno, al considerar que el alcalde «ha vuelto a hacer una maniobra de última hora rompiendo y no respetando lo que se acordó en Comisión».
Según ha explicado la portavoz del PSOE, M. Jesús Gómez del Moral, Mariscal vuelve a utilizar los Servicios Sociales «como arma arrojadiza», al condicionar la firma del convenio con la Junta de Comunidades a que ésta pague el 100% de los mismos, ha informado el PSOE en un comunicado.
Gómez del Moral ha subrayado que es «indecente» que Mariscal pida que la Junta abone la totalidad del convenio cuando fue el Gobierno de Cospedal el que redujo un 27% la aportación de la Administración regional al Plan Concertado», y ha apuntado que con esto «Mariscal lo único que hace es demostrar que está centrando su mandato en buscar el enfrentamiento con la Junta de Comunidades en vez de preocuparse por las necesidades de los ciudadanos de Cuenca».