La Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (Amfar) ha inaugurado este martes en Membrilla (Ciudad Real) la Oficina de Titularidad Compartida en la Explotación Agraria, una iniciativa que llevará por nombre ‘AGROTC’ y que era «ya casi una necesidad» tras «las numerosas solicitudes» de información presentadas en el país sobre materia.
Así lo ha manifestado la presidenta de Amfar, Lola Merino, durante un acto que ha coincidido con la celebración del Día Mundial de la Mujeres Rurales y en el que ha estado acompañada por el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio; el concejal de Membrilla Carlos Martín de la Leona, y la directora de la Oficina Nacional de Titularidad Compartida, Mariana Fuentes, según ha informado Amfar en una nota de prensa.
Esta oficina, que atenderá al público de manera presencial con cita previa, a través de correo electrónico en la dirección [email protected] y por teléfono en el número 689865603, busca «convertirse en el altavoz para que el conocimiento de la normativa y sus beneficios lleguen a todas las mujeres del campo español», ha sostenido Merino, en referencia a la Ley de Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias que entró en vigor en enero de 2012.
«Con esta ley impulsada por Amfar hemos conseguido dar visibilidad a todas las mujeres que trabajaban en las explotaciones agrarias». Gracias a esta legislación, las mujeres de agricultores y ganaderos por fin pueden disfrutar de sus prestaciones sociales propias, ver reconocido jurídicamente el trabajo que realizan en la explotación familiar agraria y recibir un tratamiento digno en caso de separación o divorcio, entre otras bondades», ha explicado Merino.
POSIBLES REFORMAS
Además, esta oficina nace también para recoger las posibles reformas que haya que solicitar a las instituciones implicadas en el desarrollo de esta nueva figura jurídica, ya que según recoge la ley, «a los cinco años de su puesta en marcha, se evaluará las posibles reformas».
«A nuestro juicio existen dos problemas esenciales. Por una parte, la falta de información, ya que son pocas las mujeres que conocen esta nueva legislación y las repercusiones económicas que tendrían para ellas, y por otra, la gran diversidad de normativa regional y la poca implicación de las comunidades autónomas, que han permitido que esta ley quede en el fondo del cajón sin que beneficie a las mujeres del campo, que era su objetivo prioritario», ha afirmado la presidente de Amfar.
Por su parte, la directora de la AGROTC, Mariana Fuentes, ha hecho hincapié en que «una vez adquirida la titularidad compartida, la mujer tendrá derecho al 50 por ciento de los beneficios e ingresos generados por la explotación, así como a cualquier ayuda o subvención que ésta reciba».
«VISIBILIDAD AL TRABAJO DE LA MUJER EN EL CAMPO»
De su lado, José Julián Gregorio ha manifestado que con esta ley se da «visibilidad al trabajo de la mujer en el campo» y ha llamado a «fomentar la titularidad compartida de las explotaciones agrarias con la colaboración de todas las instituciones», según ha informado la Delegación del Gobierno en una nota de prensa.
«Es con este tipo de políticas llevadas a cabo por el Gobierno de España y con federaciones como Amfar como se logra profesionalizar el trabajo de las mujeres rurales, apoyar la agricultura familiar, incentivar la participación femenina en el sector y en las organizaciones agrarias y mejorar la calidad de vida del medio rural», ha subrayado Gregorio.