¿Cuántos de nosotros hemos estado cerca del cáncer? SÍ, esa enfermedad que todos hemos oído hablar de ella, ya sea por los informativos o porque un familiar cercano la padeció en algún momento de su vida. Ese virus que gracias a los avances de la ciencia ha pasado de ser algo terrorífico e imbatible a algo que puede ser curado con medicina, tratamientos médicos y mucha persistencia por parte del paciente.
Sabemos que hablar de cáncer nunca resulta fácil. Sin embargo, gracias a profesionales como Lorena Martín, psico-oncóloga de la Asociación Española Contra el Cáncer, hoy día resulta más fácil que un paciente pueda validar sus emociones o que un familiar pueda comprender cómo puede apoyar a esa persona que lucha día tras día para superar ese cáncer que ya no es invencible.
Por ello, con motivo del Día Mundial del Cáncer de Mama, nos hemos puesto en contacto con esta profesional que lleva 20 años al frente de la psico-oncología, siendo una de las primeras psico-oncólogas que decidió que la comunicación era vital durante el proceso de superación de un cáncer.
La importancia de la psico-oncología
Pero, ¿cuál es la labor de un psico-oncólogo? Como ya habrán imaginado, el cáncer es una enfermedad que lleva muchos cambios a nivel emocional y físico. Por ello, el objetivo de estos profesionales es que los pacientes tengan las suficientes herramientas como para pailar el “impacto emocional brutal que se desencadena cuando hay un diagnóstico de cáncer”.
Para ello, se busca que los pacientes puedan adaptarse a esta enfermedad, que se conviertan en un “agente activo” en la superación de este cáncer y “que puedan comunicar sus dolencias y validar sus emociones, independientemente de que sean positivas o negativas”. Es primordial, que los psico-oncólogos hagan entender a los pacientes tanto “por lo que están pasando, como por la que van a tener que pasar con los tratamientos médicos”. Por tanto, la construcción de un espacio seguro por parte del psico-oncólogo es esencial para que el paciente pueda “desahogarse y no sentirse juzgado”.
Por otro lado, desde la psico-oncología también se cubre el papel importante que ejercen las familias a la hora de comunicarse con un paciente. Por ende, es esencial que el psico-oncólogo pueda “atender las emocionales de los familiares y les pueda resolver todas aquellas dudas que suscita el cáncer”. Cosas como los cambios de humor o incluso los efectos secundarios que puede dejar un tratamiento en un paciente han de ser comunicados a las familias, con el fin de que puedan comprender la situación y puedan apoyar correctamente al paciente.
Como bien destaca Lorena Martín, “la comunicación y validar las emociones que tiene el paciente es vital, por ello, su entorno familiar no debe ser un obstáculo más que ha de superar durante el proceso del cáncer, sino un pilar de apoyo”.
Los efectos del cáncer en las emociones
Según los datos ofrecidos por la psico-oncóloga de la AECC, las emociones más comunes que se ven en los pacientes con cáncer son principalmente ansiedad y estrés, constituyendo un 40% de los casos, seguidos de un 26% de malestar emocional general que incluye frustración, miedo o rabia. Sin embargo, los casos que más preocupan a los psico-oncólogos es cuando el paciente se ve dominado por la depresión y tristeza, algo que sucede el 22% de las veces.
El cáncer es una enfermedad que aflora nuestras emociones más complejas, por ello, “es importante que se entienda que los pacientes no son peores si sufren depresión o ansiedad, ni son mejores si consiguen mantenerse optimistas durante todo el proceso de curación”. Como bien expresa Lorena Martín, “el paciente ha de poder validar sus emociones y no tener que disculparse por estar mal”.
Dicho esto, comentar que la visión que se tiene de esta enfermedad ha cambiado mucho en los últimos años, algo que la psico-oncóloga puede dar crédito, “he visto ese paso de ser el cáncer algo tabú de lo que no se podía hablar, a tratarse como algo mucho más natural donde la sociedad ha puesto una sensibilidad especial”. En la actualidad, se cuenta con más información que nunca de lo que es y lo que no es el cáncer, y gracias a asociaciones como la Asociación Española Contra el Cáncer, son cada vez más las personas las que pueden acudir a estos espacios seguros donde pueden ser informados y atendidos como es debido.
Para finalizar, recordar que la AECC cuenta con un teléfono gratuito activo que se puede utilizar los 365 días del año, los 7 días de la semana y las 24 horas del día que se llama “Infocáncer” y que es el 900 100 036, es el único teléfono en Europa de atención al paciente o al familiar sobre el cáncer. Por otro lado, todos los servicios de AECC son gratuitos y no es necesario ser socio, y se acompaña al paciente en todo momento del tratamiento en cualquier tipo de cáncer.