La Guardia Civil de Navarra ha investigado a un vecino de la Comunidad de Madrid de 39 años, propietario de un criadero de perros en Toledo, como presunto autor de un Delito Contra la Flora y la Fauna (Maltrato Animal) y otro Delito de Estafa.
La investigación se inició al recibir la Benemérita en Navarra la denuncia del propietario de una cachorra, que había fallecido a los pocos días de comprarla en un criadero de Toledo. Desde que la recibieron, la perra tenía un comportamiento anómalo, apatía, vómito esporádico, inapetencia y debilidad, síntomas por los que acudieron a una Clínica Veterinaria para ser tratada, pero finalmente murió.
A la perra se le realizó la necropsia y biopsia para conocer la causa del fallecimiento, ya que el laboratorio de una de las vacunas administradas proporciona una garantía y buscaban saber si la referida vacuna había causado algún efecto secundario en la cachorra, explica el Instituto Armado en una nota.
Estas pruebas determinaron que la muerte la causó un organismo microscópico que se instala en el intestino del animal, habitual cuando el perro ingiere heces, alimentos o agua infestada con el parásito, circunstancia que se suele dar en criaderos o albergues con malas condiciones higiénico sanitarias.
La posibilidad de que la causa de la muerte de la perra fuese por falta de higiene o cuidados inadecuados en el criadero donde fue vendida, llevó a los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza SEPRONA de la Guardia Civil de Navarra a desplazarse al criadero ubicado en la provincia de Toledo.
En la inspección revisaron los libros de registro de entradas y salidas, listado de defunciones, y demás documentación que permitió analizar el funcionamiento del criadero y constatar que su propietario comete un Delito de maltrato animal por una omisión del deber de cuidado.
Así, tanto la entrada de los perros en sus instalaciones, como la salida con destino a los compradores se hacían a una edad demasiado temprana, por lo que la inmunización no era la adecuada, debido entre otras causas, a un destete prematuro de la madre.
Por todo ello, se ha investigado al propietario del criadero como presunto autor de autor de un Delito Contra la Flora y la Fauna (Maltrato Animal) y otro Delito de Estafa por vender animales teniendo conocimiento de su precario estado de salud.