El Ministerio de Educación y Formación Profesional realizará este martes 14 de marzo una prueba piloto de la nueva prueba de Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) en 50 centros de todas las comunidades autónomas españolas, Ceuta y Melilla, a excepción de las gobernadas por el Partido Popular, Aragón y el PaÃs Vasco.
Esta prueba piloto, según ha informado el Ministerio, está orientada a «armonizar las pruebas de acceso a la universidad, que se comenzarán a implantar en junio de 2024, con el carácter competencial del nuevo currÃculo». El próximo mes de junio las pruebas serán idénticas a las que tuvieron lugar en junio del año pasado y por lo tanto no les afecta ninguno de los cambios introducidos tras la aprobación de la Ley Educativa.
El Departamento que dirige Pilar AlegrÃa ha explicado que todas las comunidades autónomas fueron invitadas, a través de la Conferencia Sectorial de Educación, a participar en la elaboración de estas pruebas, pero finalmente han sido doce comunidades y ciudades autónomas las que voluntariamente han decidido formar parte.
En concreto, las regiones que participan este martes en la prueba piloto son: Cataluña (seis centros), Principado de Asturias (cinco centros), Cantabria (cinco centros), La Rioja (cinco centros), Comunidad Valenciana (cinco centros), Castilla-La Mancha (cinco centros), Canarias (cinco centros), Navarra (tres centros), Extremadura (tres centros), Islas Baleares (cuatro centros), Ceuta (dos centros) y Melilla (dos centros).
Técnicos del Ministerio se trasladarán este martes al IES Calderón de la Barca de Gijón, al que también asistirá la consejera de Educación del Principado de Asturias, Lydia Espina, para controlar y organizar la prueba.
Este pilotaje se realizará en un grupo de Primero de Bachillerato de cada uno de los centros seleccionados, ya que en Segundo de Bachillerato aún no se ha implantado la LOMLOE. La prueba piloto permitirá analizar el grado de adaptación de los estudiantes a este tipo de prueba competencial, el tiempo establecido para los ejercicios, la comparativa entre los distintos posibles modelos de ejercicios elaborados y la fiabilidad de la corrección, entre otras cosas.
El análisis de este pilotaje permitirá tomar decisiones basadas en evidencias en cuanto al modelo de prueba definitivo de cada materia que se realizará en Segundo Bachillerato a partir del próximo año 2024, y modificar, en su caso, aquellos aspectos que se determinen en los informes de análisis.
Para la elaboración de estas pruebas se han configurado grupos de trabajo coordinados desde el Ministerio, formados por expertos propuestos por las comunidades autónomas, entre los cuales se encuentran profesores de Bachillerato, coordinadores y armonizadores de la prueba, profesorado universitario y miembros de reconocidas asociaciones de las materias evaluadas.
¿CÓMO ES LA PRUEBA PILOTO?
Cada alumno realizará exclusivamente dos ejercicios: uno de una materia común y otro de la materia obligatoria de la modalidad que está cursando. En este piloto se evaluarán las materias comunes de Primero de Bachillerato que tienen una continuidad en Segundo.
En concreto, como materias comunes se evaluarán Lengua Castellana y Literatura I, Lengua Extranjera I (inglés) y FilosofÃa; y, como materias de modalidad, Dibujo ArtÃstico I, de la modalidad de Artes; LatÃn I, de la modalidad de Humanidades y Ciencias Sociales; y Matemáticas I, de la modalidad de Ciencias y TecnologÃa.
Las pruebas irán acompañadas de unos cuestionarios, e incluso de unas entrevistas personales, orientados a conocer la opinión de los alumnos sobre la estructura, contenido y caracterÃsticas técnicas de estas pruebas. En esta prueba piloto no habrá examen de Historia de España, dado que esta asignatura se imparte en Segundo de Bachillerato.
La corrección la llevará a cabo profesorado de Secundaria y de Universidad especialista en las materias evaluadas y con amplia experiencia en las pruebas de acceso a la Universidad, que no han participado en su elaboración.
A partir de los datos recogidos con las pruebas cognitivas y con los cuestionarios de contexto del alumnado, el Ministerio realizará distintos tipos de análisis. En una primera fase se llevarán a cabo análisis primarios descriptivos de la información disponible; y en una segunda fase se efectuarán análisis secundarios que permitan interpretar de manera cualitativa el impacto que tiene el modelo de prueba en función de las distintas caracterÃsticas del alumnado participante.
El Ministerio espera que estos análisis estén listos en mayo, los cuales plasmará en un informe, y tendrá en cuenta a la hora de elaborar los modelos de pruebas de todas las materias de Segundo de Bachillerato, que estarán disponibles en junio, con un año de antelación a que se celebren las primeras pruebas de acceso con el nuevo sistema. Estos modelos de prueba de Segundo de Bachillerato se realizarán en el seno de los grupos de trabajo coordinados por Educación.
El Departamento ha recordado que los alumnos participantes no serán evaluados, ni se elaborará ningún tipo de estadÃstica por centros ni por comunidades autónomas. Es decir, se trata de una prueba piloto con la que analizar si el trabajo realizado por los distintos grupos de trabajo va en la dirección pretendida, y en su caso modificar aquellos aspectos que se consideren.
¿POR QUÉ UNA NUEVA PRUEBA DE ACCESO A LA UNIVERSIDAD?
El Ministerio ha justificado la nueva prueba en base a que hay nuevas cuestiones de ordenación del Bachillerato y que hay unos currÃculos nuevos del Bachillerato, que tienen «otro enfoque competencial que implicará utilizar otras metodologÃas y otra forma de evaluar y, por tanto, debe haber coherencia entre lo que se enseña y lo que se evalúa».
Dado que el primer año que el alumnado se presentará a estas pruebas sólo llevarán dos años con los nuevos currÃculos, Educación ha señalado que deben «ser muy cuidadosos» en realizar un tránsito «natural, paulatino, midiendo una progresiva adecuación al nivel de experiencia del alumnado y del profesorado». Por ello, va a realizar un periodo transitorio «manteniendo la misma estructura que se ha ido realizando hasta el momento».
Los grupos de trabajo seguirán trabajando para elaborar de qué forma debe ser la estructura de los ejercicios de cada materia, para que sea un modelo «equiparable en todo el Estado»; de qué forma deben evaluarse estos ejercicios, para que en todo el territorio «se corrija de igual forma y con los mismos criterios»; y para elaborar modelos de ejemplos de ejercicios, como recurso para el profesorado y el alumnado.