La falta de lluvias acumulada en el conjunto de España desde que el 1 de octubre de 2021 comenzó el año hidrológico hasta el 26 de julio de 2022 es de un 26 por ciento por debajo a los valores normales para este periodo, ya que en este plazo se ha acumulado 419 litros por metro cuadrado cuando la cantidad normal sería de 569 litros por metro cuadrado, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Durante el último periodo contabilizado, del 20 al 26 de julio las precipitaciones apenas afectaron a la cornisa cantábrica, a los Pirineos más orientales, a Huesca, el sur de Aragón y el oeste de Castellón, así como al litoral de Cataluña y al este de Albacete.
En concreto, recogieron más de 10 litros por metro cuadrado de precipitación en el norte de Lugo, en el litoral de Cantabria y en zonas más aisladas del interior de Teruel, del pirineo gerundense y de la costa de Barcelona.
Entre las precipitaciones acumuladas en observatorios principales, la AEMET destaca las recogidas en San Sebastián, con 13 litros por metro cuadrado; Oviedo, 9 litros por metro cuadrado; Santander-Parayas y Fuenterrabía, 6 litros por metro cuadrado y en Asturias-Avilés, 5 litros por metro cuadrado.
Más allá de las precipitaciones incluidas en el presente balance, el día 27 hubo lluvias puntuales que afectaron al tercio este de la Península y que dejaron más de 10 litros por metro cuadrado en el interior de Teruel y en el sur de la provincia de Barcelona.
Por zonas, gran parte de la Península y del archipiélago canario están por debajo de sus valores normales y, por lo tanto, tienen déficit de precipitaciones. En especial destaca el tercio oeste y el interior de la Península, así como casi toda Andalucía, excepto el este; Cataluña, la provincia de Guadalajara y las islas Canarias, con zonas que no llegan a alcanzar el 75 por ciento de las lluvias habituales y superan el 25 por ciento de déficit.
Por el contrario, ha llovido por encima de los valores normales en una franja en la cornisa cantábrica que va desde la mitad oriental de Asturias hasta Navarra, en el interior de Aragón, en un área del oeste de Cuenca, en la provincia de Albacete, en una franja al noreste de Badajoz, en el norte de la isla de Mallorca, en las Pitiusas, y especialmente en el levante que va desde Almería y Granada hasta el valle del Ebro, con áreas entre Almería, Murcia y Granada junto con puntos del litoral de Valencia y Alicante donde las precipitaciones doblan el valor medio del periodo 1981-2010.