La consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno de Castilla La Mancha, Blanca Fernández, ha dicho este jueves en Oviedo que el Ejecutivo regional está trabajando en la puesta en marcha de un modelo con un mÃnimo de cinco centros de crisis para vÃctimas de agresiones sexuales.
«Nos planteamos que a lo largo de 2023 podamos tener la red ya articulada», ha dicho Fernández, a preguntas de los periodistas, tras reunirse en Asturias con la directora general de Igualdad del Gobierno asturiano, Nuria Varela.
De hecho, la visita de Fernández a Asturias tiene como uno de sus principales objetivos conocer de cerca el funcionamiento el centro de crisis para vÃctimas de agresiones sexuales que lleva funcionando en Asturias desde finales de 2020.
A juicio de Blanca Fernández la iniciativa asturiana es un «salto cualitativo más» en la lucha contra la violencia machista. «En Castilla-La Mancha nos tomamos muy en serio las polÃticas de igualdad y tenemos muy definida las polÃticas, en materia de prevención de la violencia machista, de protección a las vÃctimas, de esa rehabilitación que necesitan emocional y también esa oportunidad, a veces en lo económico, en lo social, en lo laboral», ha indicado.
Pero la dirigente de C-LM no se plantea poner un único centro de crisis como el de Asturias. Entre las dos comunidades, ha indicado, existen diferencias, sobre todo de tamaño. «Nuestra región tiene ochenta mil kilómetros cuadrados en la que caben Bélgica, Holanda, Luxemburgo y nos sobran dos mil kilómetros todavÃa, veinte mil municipios y montón de entidades locales, con núcleos de población en un territorio muy disperso».
De esta forma, la idea de Fernández es activar al menos cinco centros de referencia de atención a vÃctimas de agresiones sexuales, uno por cada provincia. «Hay localidades que se distancian de otras en la región cinco seis horas del coche y esto es bastante difÃcil, bastante diferente a lo que es Asturias», ha explicado.
A dÃa de hoy ya se están analizando en C-LM espacios, posibles locales, equipamientos e infraestructuras para esos nuevos centros. «Tenemos ochenta y cuatro centros de la mujer en la región, quince recursos de acogida, cuatrocientas sesenta profesionales trabajando en materia de protección, prevención, la asistencia a las vÃctimas de violencia de género, también a las vÃctimas de agresión sexual, pero hay que dar un salto cualitativo», ha señalado.