La Unidad de Deshabituación Tabáquica del Hospital General Universitario de Ciudad Real, centro dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), ha recibido la acreditación de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) que avala su calidad asistencial como consulta monográfica, la especialización de los profesionales, la realización de pruebas específicas o los grados de complejidad en el abordaje de pacientes.
La acreditación tiene una validez de cinco años y supone un reconocimiento de la consulta como Unidad Especializada en procesos de deshabituación del tabaquismo, según ha informado el Sescam en una nota de prensa.
Ésta se trata de una enfermedad crónica que afecta al 30 por ciento de la población española mayor de 16 años y que causa múltiples enfermedades respiratorias, tanto es así, que no se comprendería una correcta atención terapéutica a los portadores de estas enfermedades sin que se acompañase de una adecuada intervención terapéutica sobre el tabaquismo que la mayoría de ellos padece.
Desde la consulta del hospital «trabajamos la atención primaria y secundaria del paciente. Dejar de fumar es la intervención más eficaz para cualquier patología», ha explicado la neumóloga responsable de una Unidad de Tabaquismo, Patricia Mata. «A partir de un consumo acumulado de 10 paquetes-año se considera que una persona puede desarrollar problemas asociados al tabaco», ha añadido.
El tabaquismo se entiende como una enfermedad que forma parte integrante del conjunto de patologías que deben ser atendidas por los especialistas en Neumología y Cirugía Torácica. «Está comprobado que existen el doble de posibilidades de que un paciente deje de fumar cuando se trata en una consulta especializada, se duplica el éxito de deshabituación», ha señalado Mata.
La terapia combinada de fármacos y de apoyo psicológico que aplica la Unidad consigue que la mitad de los pacientes que siguen el tratamiento prescrito se mantengan sin fumar al cabo de un año.
Un factor «determinante» para alcanzar el éxito es «la voluntad de dejar el hábito y la motivación que se trabaja mediante terapias conductuales de forma paralela al farmacológico para disminuir la abstinencia».
Este tratamiento conductual y de seguimiento con visitas regulares a la Unidad de Tabaquismo puede llegar a durar un año, tiempo durante el cual se prescribe una terapia de sustitución.
MÁS DE 3.000 PACIENTES
La Unidad de Deshabituación Tabáquica del Hospital de Ciudad Real nació en el año 2003 de la mano de la neumóloga Rocío Santiago y la enfermera especializada Cruces Sánchez-Camacho. Desde entonces, se ha prestado apoyo para dejar de fumar a más de 3.000 pacientes con un porcentaje de éxito de entre el 35 y el 40 por ciento, ha explicado Pilar Núñez, enfermera especializada.
«Cada año recibimos una media de 220 nuevos pacientes en la consulta que quieren dejar de fumar y piden apoyo», ha subrayado Núñez, quien pone el valor el papel de la enfermería en el seguimiento de estos pacientes a los que se les prestan unos cuidados a nivel emocional y psicológico «muy importantes». «Fumar es un hábito nocivo, cuya deshabituación implica modificar nuestra conducta y esa es la parte más delicada de tratar», ha añadido.
Unos 900 pacientes de media pasan cada año por la consulta monográfica de tabaquismo, de ellos cerca del 75 por ciento corresponden a revisiones periódicas para el seguimiento de las terapias.