La Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU) -antigua Selectividad- ha comenzado este lunes en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) con el examen de Lengua y Literatura en el que los alumnos han tenido que responder a preguntas sobre Lorca, Luis MartÃn-Santos y los dialectos y las variedades socioculturales del español. Todo ello bajo las medidas de seguridad impuestas por el coronavirus, tales como mascarillas, gel hidroalcohólico y distanciamiento social.
Asà lo han indicado a los medios cuatro alumnas del Instituto SantÃsimo Cristo de la Sangre de Torrijos (Toledo), que han coincidido en que el hecho de tener más opciones en el examen ha hecho que fuera «más fácil» de lo que imaginaban.
En este sentido, Gema ha apuntado que ha caÃdo más o menos lo que pensaba que iba a caer. «Este año tenÃamos más opciones, ha caÃdo algo que me gusta y llevaba bien preparado y he salido muy contenta del examen», ha dicho.
En concreto, ha explicado que en el examen de Legua una de las preguntas era sobre las variedades de los dialectos del español y la otra sobre la variedad de sociedades culturales del español. A ello ha sumado dos textos a comentar, uno periodÃstico y otro humanÃstico, y el comentario literario con una opción con Lorca y otra con Luis MartÃn-Santos.
Respecto a las medidas de seguridad, ha señalado que durante el examen se han podido quitar las mascarillas aunque el resto del tiempo las han tenido que llevar puestas. «He estado muy nerviosa, ahora estoy más tranquila y me lo esperaba más duro por las medidas».
LA PREPARACIÓN EN CASA, «PEOR»
Sobre la preparación en casa, esta alumna de Torrijos ha reconocido que ha sido «peor» por el COVID-19 y que lo ha llevado «muy mal» a pesar de haber tenido los medios para poder estudiar y acceder a las clases online, lamentando asà que haya habido compañeros que no han tenido esa posibilidad.
Laura, otra de las alumnas que han hecho este lunes la primera prueba de la EvAU, ha dicho que el examen ha ido «bastante bien» y mejor de lo que se esperaba, reconociendo que las opciones lo han facilitado «mucho». «Nerviosa al principio pero cuando ya nos han puesto el examen, bien».
«Con la mascarilla es diferente pero nos han dejado quitárnosla en el examen y habÃa bastante distancia de seguridad», ha apuntado, para agregar que el siguiente examen, de Historia, se presenta bien y que con «las facilidades» de las opciones puede ser más fácil que otros años.
De su lado, Alejandra ha reconocido que al principio estaba «bastante nerviosa» porque no sabÃa cómo iba a ser la EvAU con las medidas de seguridad establecidas por el coronavirus, aunque luego todo ha salido «bastante bien». «Sabiendo cómo es todo prevemos que los siguientes dÃas sean más relajados».
Finalmente, Elsa ha comentado a los medios que se imaginaba el examen «más duro» aunque ha reconocido que ha pasado «muchos nervios» que se han disipado al darse cuenta de que era «un examen más». «CreÃa que con la mascarilla me iba a agobiar mucho pero cuando nos hemos sentado nos han dejado quitárnosla», ha concluido.
LA PLANIFICACIÓN
De su lado, el presidente del Tribunal Número 27 de la Fábrica de Armas, Pedro Jiménez, ha destacado ante los medios la planificación con la que se ha llevado a cabo la EvAU de este año por parte tanto de la UCLM, como de la Junta de Comunidades y del Ayuntamiento de Toledo, que ha ayudado en los accesos.
«La idea es que los alumnos guardaran la distancia de seguridad y que si se produjese alguna aglomeración se utilizara la mascarilla y creo que lo hemos conseguido», ha indicado, para añadir que en la Fábrica de Armas de Toledo hay cuatro tribunales y se han habilitado tres puertas de entrada.
Los alumnos sabÃan previamente por la puerta por la que tenÃan que entrar y a partir de ahà se han hecho dos llamamientos, uno a las 8.30 horas y otro a las 9.00 horas. «Se les ha acompañado a las aulas, se les ha dado las pegatinas y un kit de la Junta con mascarilla, gel y toallitas. Ha ido todo bastante rápido y con normalidad».
En total, por los cuatro tribunales que hay en la Fábrica de Armas pasarán 1.900 alumnos, examinándose por la mañana los de Ciencias Sociales y Humanidades y por la tarde los de Ciencias. «Hemos intentado calmarles en cada momento y acompañarles en todo lo posible», ha dicho Jiménez, para concluir que no ha habido «nada extraño» digno de destacar.