Con fecha 13 de marzo de 2020, la Diputación de Albacete emitió la Circular que establecía las medidas preventivas, organizativas y recomendaciones de salud para el personal a su servicio y de sus Organismos Autónomos y, con fecha 16 de marzo, la que determinaba los ‘Servicios Esenciales’ en esos ámbitos, que se han venido potenciando desde el primer momento.
A la vista del desarrollo y evolución de la crisis sanitaria producida por la pandemia del COVID-19, el Comité de Seguridad y Salud Laboral de la institución adoptaba, en una de sus últimas reuniones periódicas, las medidas sobre la reincorporación progresiva y gradual a la prestación presencial de los Servicios de las empleadas y los empleados públicos a los centros de trabajo o Servicios, siempre con el fin de garantizar su seguridad y la protección de su salud.
Reincorporación progresiva
Unas medidas recogidas en un Decreto que en principio, sería la hoja de ruta a seguir en la institución, si bien será el propio Comité el que determine los cambios necesarios, conforme a la evolución de la propia normativa superior al respecto.
En principio, ese Decreto establece que se priorizará la prestación de trabajo en su modalidad de teletrabajo, continuando bajo esta útil fórmula el personal que durante la situación de alarma ha venido prestando sus servicios mediante dicha modalidad (una gran mayoría que ha hecho posible, por ejemplo, que la parte más administrativa, de trámites y de gestión, no haya dejado de dar servicio a la gente en ningún momento).
Esta situación se extendería hasta el día siguiente a la entrada de la provincia de Albacete en la Fase III de la ‘desescalada’ según la normativa dictada por el Gobierno de España, momento en el que esos y esas profesionales, volverían presencialmente a sus puestos de trabajo. Por su parte, el personal de Registro se incorporaría mediante turnos al inicio de la Fase II.
Aquellas personas que no están realizando sus funciones mediante teletrabajo, se reincorporarían de forma presencial a sus funciones el próximo lunes, día 25 de mayo.
No obstante, el personal incluido dentro de los grupos vulnerables ante el COVID-19 cuya reincorporación al puesto de trabajo podría ser voluntaria el día 25 de mayo, deberá solicitar para el supuesto de instar la no reincorporación al puesto de trabajo, el correspondiente informe emitido por el Servicio de Prevención que evalúe su presencia en su puesto, e informe sobre las medidas de prevención, adaptación o protección, teniendo en cuenta la existencia o inexistencia de unas condiciones que permitan realizar el trabajo sin elevar el riesgo propio de la salud de la empleada o el empleado público.
No podrían incorporarse al trabajo quienes se encuentren en situación de incapacidad temporal por COVID-19.
Atención al público y flexibilización horaria
En los Servicios de atención al público, la Diputación seguirá priorizando estos días la atención telefónica y telemática. Sería a partir de la Fase II cuando se podría prestar la atención de forma presencial, siempre previa cita. En el momento en el que entre en vigor la Fase III en el territorio provincial albaceteño, cesarían las restricciones de atención al público anteriores.
Al mismo tiempo, la flexibilización de la jornada laboral será un mecanismo que tendrá como finalidad evitar al máximo cualquier riesgo para la salud de las empleadas y empleados de la Corporación así como prestar de forma correcta los diferentes Servicios Públicos prestados por la institución.
Esto conllevará la apertura de los centros de trabajo, sin horario especial, desde las 7:30 horas hasta las 20:00 horas, salvo la regulación específica del horario de verano. El responsable de cada Servicio será el encargado de autorizar dicha flexibilización horaria, siempre atendiendo a las circunstancias concurrentes en el Servicio y en el personal a su cargo.
En todo caso, cada uno de estos pasos se darán aplicando todas y cada una de las medidas preventivas generales incluidas en el ‘Protocolo General de Reanudación de la Actividad en el Diputación de Albacete’ que ha sido negociado por el Comité de Seguridad y Salud Laboral de la institución con el objetivo de salvaguardar la integridad tanto de los y las profesionales de la Casa y, de esta forma, del conjunto de la ciudadanía a la que han de prestar su atención directa.