Las farmacias están realizando la entrega de medicamentos en los domicilios a los pacientes más vulnerables en todas las comunidades autónomas, una medida enmarcada dentro del plan de medidas excepcionales en el estado de alarma impulsadas por el Consejo General y los colegios de farmacéuticos ante la pandemia. Hay varias regiones, como la castellanomanchega, donde se han firmado acuerdos con Cruz Roja y Cáritas para llegar a donde los farmacéuticos no pudiesen.
Con esta iniciativa se está asegurando en todo momento la continuidad de los tratamientos para que los ciudadanos tengan acceso permanente a su medicación, sin tener que acceder a la farmacia, evitando asà desplazamientos y riesgo de contagio de la población más vulnerable.
«En España los farmacéuticos se están volcando en esta emergencia, con la máxima responsabilidad sanitaria, para asegurar los tratamientos a pacientes dependientes, en cuarentena, inmunodeprimidos, crónicos complejos con enfermedades respiratorias, diabéticos, con enfermedades cardiovasculares. La Farmacia es el primer nivel de la atención sanitaria a la población y está desarrollando una labor ejemplar en esta pandemia, también en la entrega de medicamentos a domicilio para garantizar la continuidad de la atención farmacéutica en esta la lucha contra el Covid-19», ha dicho el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, Jesús Aguilar.
La entrega de medicamentos a domicilio ha sido una de las medidas puestas en marcha en Europa durante la pandemia, tal y como ha recomendado la FederaciĂłn FarmacĂ©utica Internacional (FIP) a los gobiernos, en un llamamiento al apoyo de los farmacĂ©uticos como aliados esenciales en esta crisis sanitaria mundial. En 14 paĂses este servicio ya estaba implantado y en algunos paĂses como Reino Unido se ha financiado durante la crisis para servir a los grupos más vulnerables, mientras que en otros paĂses como Portugal, Italia y España, se ha implantado durante esta crisis.
En España, la entrega de medicamentos en los domicilios de los pacientes más frágiles y vulnerables ha sido una prioridad de la profesiĂłn farmacĂ©utica que se ha dotado, además, de acuerdos con Cruz Roja y Cáritas para llegar a donde los farmacĂ©uticos no pudiesen. Los convenios con Cruz Roja y Cáritas han permitido contar con el soporte del voluntariado en la mayorĂa de las Comunidades AutĂłnomas: AndalucĂa, AragĂłn, Asturias, Baleares, Castilla La-Mancha, Castilla y LeĂłn, Cataluña, Murcia, Navarra, La Rioja y PaĂs Vasco.
Concretamente, a través de Cruz Roja, en estas semanas los farmacéuticos han atendido a más de 4.000 personas en situación de vulnerabilidad. En Cataluña han colaborado también en la entrega de medicamentos a domicilio una red de voluntarios, formada por estudiantes de Farmacia de la Universidad de Barcelona y la Universidad Ramon Llull, asà como colegiados que en estos momentos no están pudiendo desarrollar su actividad laboral con normalidad.