Agentes de Policía Nacional han detenido en Valdepeñas (Ciudad Real) a tres varones como presuntos autores de un delito de estafa cometida mediante el timo de los «billetes tintados». Contactaban con posibles víctimas para proponerles la compra de grandes cantidades de efectivo en billetes teñidos y las sustancias para revelarlos.
La investigación se inició a finales del mes de julio de este año, cuando un ciudadano ponía en conocimiento de la Comisaría de Valdepeñas, que un grupo de individuos había contactado con él proponiéndole un extraño «negocio» que podría encubrir una estafa conocida como el timo de los billetes tintados, según ha informado en nota de prensa la Policía.
Con los datos aportados por la víctima se realizaron las primeras pesquisas para determinar la identidad de los estafadores, que resultaron ser muy laboriosas, ya que utilizaban identidades falsas, cambiaban de teléfono semanalmente y establecían fuertes medidas de seguridad para evitar ser detectados e identificados.
La constancia de los investigadores llevó a su identificación, centrándose desde ese momento en lograr la detención de todos los partícipes e intervenir todas las pruebas posibles.
En la fase final de la investigación, el pasado día 11 de septiembre, se estableció un dispositivo que culminó con la detención en Valdepeñas de los tres varones que formaban el grupo criminal. Los agentes también se incautaron de un maletín de color negro con cierre de seguridad en el cual había un varios tacos de «billetes tintados» por valor de 20, 50, 100 y 500 euros, además de varios botes blancos con líquidos, tijeras, guantes, cúter, cinta aislante, seis teléfonos móviles, varias tarjetas SIM, una tarjeta de residencia falsificada y el vehículo que utilizaban para desplazarse.
La operación, en la que han colaborado la Brigada Provincial de Policía Judicial de Ciudad Real y la Brigada Local de Policía Judicial de Valdepeñas, ha logrado desarticular este grupo criminal altamente especializado que actuaba a nivel nacional e internacional.
EL ENGAÑO DE LOS «BILLETES TINTADOS»
Los presuntos autores, seleccionan a sus víctimas a través anuncios de carácter o contenido económico o empresarial publicados por éstas en Internet, contactan con los anunciantes y se muestran interesados por su negocio o proyecto.
Una vez establecido este primer contacto le indican que en su país de origen disponen de dinero en efectivo de distinta procedencia, si bien este dinero tuvo que ser «tintado» (impregnado de sustancias) para evitar que las autoridades del país puedan embargarlo en controles fronterizos, pero que esta impregnación puede ser retirada mediante la aplicación de otras sustancias de uso común (betadine y agua), realizando ante la víctima una demostración.
De este modo, crean en la víctima la certeza de que podrá disponer de elevadas sumas gracias al dinero que van a facilitarle, que dobla o triplica la cantidad que el perjudicado va a «pagar» por ella.
Para convencer a la víctima y persuadirla de la veracidad de su relato establecen una serie de contactos y demostraciones, llegando incluso a facilitarle moneda legítima cuya validez puede comprobar en entidades bancarias, con lo que logran despejar la desconfianza que el supuesto «negocio» pueda generar.
El último acto de la estafa consiste en el intercambio de dinero: la víctima proporciona dinero legítimo y a cambio obtiene de los estafadores una cantidad que duplica o triplica la cantidad proporcionada en «billetes tintados» que no son más que copias de billetes auténticos en folios de color, entre los que han insertado algún billete de curso legal para evitar que se percate del engaño.
En este último paso también le facilitan las sustancias con las que habrá de limpiar los billetes tintados, informándole de que el proceso tiene una duración de 24 horas, evitando que el engaño se descubra de inmediato, y eludiendo así de este modo la posibilidad de que la víctima avise a la Policía.