UPA Albacete ha alertado este miércoles de la «dramática situación» que viven los cultivos de secano en la provincia. La causa es la escasez de lluvias y el aumento de temperaturas que achacan al cambio climático y anticipan una «mala cosecha» de cereales, oliva y viña.
Tal y como ha apuntado en rueda de prensa el secretario provincial de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en la provincia de Albacete, Ramón Sáez, el 2019 es el tercer año con menos pluviometría del siglo, que de igual modo ha registrado una de las primaveras más calurosas de las últimas décadas.
Un cóctel –altas temperaturas y falta de lluvia– que afecta a casi todos los cultivos de secano, especialmente a los cereales, la oliva y la viña. En el caso del cereal, según ha apuntado Sáez, las previsiones muestran que puede tener una pérdida del 30% y en la región y en el caso de Albacete un 20%. «La sequía ha hecho que el cereal no haya habido rendimientos de la estimación prevista».
En el caso del olivar el cultivo ha sufrido las altas temperaturas que han dado lugar a una «mala cosecha» con un descenso en la producción del 40%.
Por su parte, el almendro parece resistir el envite de la climatología. Esperan desde la UPA que la campaña tenga rendimientos similares a la anterior, aunque no se descarta «que vaya a menos». En este caso la sequía no es la causante, lo es otra consecuencia del cambio climático, como son las heladas a destiempo que se produjeron en la región en plena primavera dejando, finalmente, un 30% menos de producción total de almendra.
En el caso de las viñas, se espera que la cifra de producción, entre vino y mosto, no alcance la del año pasado. «En determinadas comarcas no hay tanta producción», advierte Sáez, que apunta a La Manchuela donde se han registrado en las últimas semanas temperaturas de hasta 42 grados que hicieron que algunos racimos se secaran.
DAÑOS TRAS LA GRANIZADA DEL DOMINGO
A los estragos que vienen acarreando las cosechas esta campaña se le ha sumado la tormenta de granizo que descargó el domingo por la tarde y afectó especialmente a La Manchuela. El peor parado ha sido el municipio de Casas Ibáñez, donde casi el 100% de sus cosechan han quedado dañadas, tal y como apunta Pedro González, miembro de UPA Castilla-La Mancha.
Se estima que la tormenta ha causado daños de entre el 50 y el 85% de la producción, especialmente en el cultivo del viñedo. Otros municipios afectados han sido Alborea, Abengibre, Villamalea y Navas de Jorquera.
Precisamente en esta zona, en la localidad de Casas Ibáñez, la UPA va a celebrar una jornada de peritaje, programada antes de la tormenta, en la que se va a mostrar a los agricultores a hacer la peritación «sobre el terreno», ha explicado González.
El objetivo es que conozcan la documentación que tiene que aportar el agricultor. «Una vez que hayamos tomado esos datos se dará una parte teórica para mostrar cómo trasladar esos datos en un acta de tasación para una posible indemnización», ha sentenciado.
