Alberto Rojo ha pedido al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que le cese en su cargo como delegado de la Junta en la provincia de Guadalajara para dedicarse en exclusiva al Ayuntamiento de la capital alcarreña tras ser nombrado alcalde el pasado sábado.
Este ha sido otro de los acuerdos que ha adoptado este martes el Consejo de Gobierno, según ha informado el vicepresidente primero del Ejecutivo regional en funciones, José Luis Martínez Guijarro, en rueda de prensa en el Palacio de Fuensalida.
Aunque no existía incompatibilidad legal entre los dos cargos, Alberto Rojo -según ha explicado Martínez Guijarro-, pidió al presidente regional el relevo «inmediato» en la Delegación de la Junta para poder dedicarse en exclusividad a la gestión del Ayuntamiento de Guadalajara.
Martínez Guijarro también ha firmado como vicepresidente una resolución de encomienda de las gestiones de la Delegación de la Junta al actual director provincial de la Consejería de Agricultura en la provincia de Guadalajara, Santos López, hasta que se conozca la nueva estructura del Gobierno regional una vez que se proceda a la elección del presidente y a la constitución del nuevo Gobierno.