La secretaria de Igualdad del PSOE de Castilla-La Mancha, Montserrat Muro, en el Día Internacional contra la Violencia de Género, ha reiterado la necesidad de seguir luchando para acabar con lo que ha calificado de «terrorismo machista».
Muro, en nombre de todos los socialistas de la región, ha mostrado en rueda de prensa el compromiso de su partido con la lucha contra cualquier tipo de violencia ejercida sobre las mujeres, «uno de los principios irrenunciables de cualquier sociedad», ha informado el PSOE en nota de prensa.
En este sentido, ha asegurado que eliminar la violencia y proteger a las víctimas «no es una opción, es una obligación». «Las mujeres tienen derecho a vivir en libertad y a que sus vidas no estén en peligro por el hecho de ser mujeres», ha sentenciado.
Reconoce que se trata de un problema en el que Castilla-La Mancha lleva décadas luchando contra. «No en vano, fuimos la primera región de toda Europa en aprobar una ley contra la Violencia de Género». «Sin embargo, «los tiempos cambian, no desaparece el machismo en nuestra sociedad y por eso, en nuestra región volvemos a ser pioneros al aprobar una norma más avanzada para dar respuesta a los nuevos tipos de violencia contra las mujeres».
En palabra de la responsable socialista, «en Castilla-La Mancha contamos con una ley valiente, con medidas identificables y presupuesto para la ejecución de las mismas. Y, algo que es muy importante, se adapta a las nuevas realidades al reconocer las diversas manifestaciones de la violencia machista».
Además, ha recordado que incorpora la orientación marcada por el Pacto de Estado contra la Violencia de Género, un Pacto que para Muro, «ahora con el Gobierno Socialista del presidente Sánchez se llevará a la práctica, después de la inacción del Ejecutivo de Rajoy que no lo dotó de presupuesto a pesar de ser aprobado hace más de un año por las cámaras de nuestro país».
«Con leyes como ésta se pone de manifiesto que cuando el Partido Socialista gobierna en las instituciones, su compromiso para combatir la violencia de género y el machismo es firme y lo hace con todas las de la ley», ha argumentado, para agregar que «no seremos una democracia plena mientras existan mujeres amenazadas e inseguras y mientras algunas de estas mujeres acaben asesinadas».
Sin embargo, ha proseguido, los datos nos dicen que no se puede bajar la guardia porque «cada 8 horas se comete una violación en nuestro país; y en el mundo, una de cada tres mujeres ha sufrido o sufrirá a lo largo de su vida un acto de violencia machista por el hecho exclusivo de ser mujer, sin olvidar los matrimonios forzados de niñas y mujeres o las que son sometidas a la mutilación genital».
Por eso, hacía una llamada de atención a otra mitad de la población, los hombres «porque también es obligación de ellos acabar con la violencia machista» un reproche que lanzaba sobre todo a «los maltratadores, violadores, agresores, clientes-prostituyentes, acosadoresm en definitiva, aquellos que se convierten en cómplices directos de la vulneración de los derechos y libertades de las mujeres, por acción u omisión».