Dieciséis usuarios de asociaciones y centros ocupacionales forman parte del programa “Dipu-Capacita”, una iniciativa de nuevo cuño que responde al compromiso que adquirió el presidente de la institución provincial, José Manuel Caballero, tras escuchar las reivindicaciones que verbalizaron los participantes en el pleno conmemorativo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad. Se trata de una iniciativa consistente en la realización de prácticas laborales en servicios de la Diputación, lo que les permitirá formarse y adquirir una experiencia que les ayudará a ser contratados por otras empresas y entidades.
Caballero ha recibido a los nuevos trabajadores de la Diputación acompañado por Beatriz Fernández, vicepresidenta de Personal, el área que coordina un programa que se pone en marcha para visibilizar ante los demás que las personas con capacidades diferentes pueden realizar tareas con el mismo grado de efectividad que el resto de empleados de una entidad pública o privada.
Considera Caballero que “Dipu-Capacita” puede servir de ejemplo no sólo a empresas sino también a los ayuntamientos de la provincia, porque otro de los objetivos que persiguen es hacerlo extensivo, si la experiencia resulta satisfactoria, a todos los pueblos de la provincia, de manera que se pueda multiplicar de forma considerable el número de contrataciones. Y ha añadido que la institución provincial incrementaría los recursos económicos, que en esta ocasión ascenderán a 30.000 euros en el caso de que los 16 usuarios seleccionados trabajen seis meses, con el objetivo de que el programa no resulte gravoso a los consistorios participantes.
La Diputación de Ciudad Real, según ha explicado, trabaja en tres direcciones con el colectivo de las personas con capacidades diferentes. Una es la tradicional y heredada del mandato anterior, consistente en la concesión de ayudas para financiar servicios y equipamientos a asociaciones y entidades. Desde que Caballero asumió responsabilidades de gobierno se ha duplicado la cuantía pasando de 150.000 a 300.000 euros para lograr una mayor atención a los integrantes de este colectivo en la provincia.
Por otro lado, se ha impulsado una buena oferta de ocio inclusivo, atendiendo a las recomendaciones que han trasladado al Equipo de Gobierno los expertos de las diferentes entidades con las que se colabora. Por ejemplo, el encuentro que se impulsa desde el área de deportes cuando comienza el verano se han incorporado nuevas actividades y se ha involucrado a las familias. Y el programa de fomento del turismo “Paseos Reales” se ha hecho extensivo de forma gratuita a todas las entidades que trabajan con personas con discapacidad y de carácter socio-sanitario. Se pueden visitar la mayoría de las 22 rutas establecidas por toda la provincia y disfrutan de alojamiento una o dos noches en el Palacio de los Condes de Valdeparaíso.
Pero para que se produzca la verdadera integración, a juicio de Caballero, se tiene que hacer un esfuerzo por incentivar el acceso al mercado de trabajo. De ahí que la Diputación haya desarrollado con la Junta de Comunidades un programa de empleo conjunto que en 2017 han concurrido 30 asociaciones de discapacidad y sociosanitarias que ha permitido prestar servicios a 109 trabajadores y trabajadoras sin coste alguno para las entidades solicitante. Se ha establecido un salario de 740 euros y a lo largo de este años los usuarios han podido acceder a otros seis meses de período laboral activo. En lo que va de 2018, atendiendo a los datos que ha facilitado, se han formalizado 138 contratos a coste cero.
Pero Caballero estima que estas iniciativas, aunque son necesarias, no dejan de ser contratación pública, motivo por el que han impulsado las prácticas laborales para que los participantes puedan acreditar una formación y una experiencia que les permita acceder al mercado de trabajo.
Ha agradecido a los jefes de servicio su disposición a acoger a nuevos trabajadores y trabajadoras, a los que se les orienta y se les enseña, porque para la Diputación es muy importante que el programa salga bien, ya que el objetivo final es lograr el mayor grado de felicidad en el seno de la ciudadanía, según ha remarcado Caballero.
Precisamente, uno de los trabajadores contratados, José Luis Barreda, ha tomado la palabra para manifestar su felicidad y satisfacción por tener la oportunidad de trabajar en la residencia Santo Tomás de Villanueva, concretamente en el servicio de cocina. Ha agradecido la atención que está teniendo por parte de sus compañeros y ha afirmado que está muy contento en su nuevo trabajo, al que se ha adaptado con facilidad.