Estaba destinado a ser un área destinada al ejercito del aire, pero acabo convirtiéndose en uno de las joyas naturales de nuestra región. Y es que Cabañeros, es mucho más que un parque nacional: es un lugar excepcional, único. Zona de supervivencia del gran bosque mediterráneo de Europa, refugio de la fauna ibérica más amenazada, hogar de fósiles de mas de 500 millones de años de antigüedad.
A punto estuvo esta reliquia de convertirse en campo de tiro, pero en la actualidad, y debido al gran refugio de aves rapaces que es, albergando cigüeñas negras y otras especies muy dañadas, se ha convertido en uno de los rincones mas protegidos y valiosos de los Montes de Toledo.
Y es que hasta Garcilaso de la Vega hace referencia a la belleza y al magnetismo que tiene el territorio de Cabañeros, un espacio poblado de encinas y alcornoques, propios de la zona con animales majestuosos como ciervos y buitres. Un lugar desconocido para la mayoría y, quizás de ahí, radica su estremecedor e inexplorado encanto
Cada uno de sus recovecos incita a dejar atrás el coche y calzarse las botas en un afán aventurero de adentrarse en la profundidad del los bosques y los senderos que se ramifican por su espesura, donde flora y fauna crean un matrimonio perfecto para que sus invitados, gocen de una experiencia inolvidable.
