La central nuclear de Trillo, en Guadalajara, ha sido desconectada de la red eléctrica a las 19.56 horas de este viernes, 18 de mayo, para iniciar su 30ª Recarga de Combustible, que durará 38 días e incluirá, entre los trabajos programados, inspecciones que se realizan cada 10 años.
Para trabajar durante este periodo se han contratado los servicios de más de 40 empresas especializadas que emplearán a más de 1.000 trabajadores adicionales a la plantilla habitual de la Central, la mayoría de Castilla-La Mancha, ha informado la central en un comunicado.
Estos profesionales han recibido la formación adecuada a las actividades a realizar en la planta enfocada a la prevención de riesgos laborales y a evitar el error humano en la ejecución de los trabajos programados.
Entre las actividades programadas destacan la inspección ultrasónica de pines de centrado de elementos combustibles, la de sellos en dos bombas principales y revisión del cojinete inferior en una de ellas, la inspección mecanizada de la vasija de presión del reactor y del material base y la inspección por corrientes inducidas en el 100% de tubos de un generador de vapor.
Se realizará también la prueba de muelles de los internos superiores, la prueba de presión del circuito primario y la de capacidad en baterías de redundancia 2/6. Igualmente, se acometerá la revisión eléctrica y mecánica de la redundancia 1/5, la del generador eléctrico y de la excitatriz y de las válvulas del lazo 2 de vapor principal y se sustituirá el convertidor rotativo GZ40 por ondulador estático.
Durante el año 2017 la producción bruta de la central de Trillo fue de 8.531 millones de kWh., lo que supone el 14 por ciento de la producción nuclear española y el 3 por ciento de la producción eléctrica nacional. La instalación tiene una producción de energía eléctrica bruta acumulada de 239.025 millones de kWh.