La lluvia de meteoros de las LÃridas llega a su máximo visible en España este domingo 22 de abril a las 20.26 horas, pero podrá verse durante toda la noche del 22 al 23 de abril, según cálculos del Observatorio Astronómico Nacional (OAN).
No obstante, este fenómeno astronómico es visible desde el hemisferio norte (también desde el sur pero a un menor ritmo) entre el 16 y el 25 de abril aproximadamente.
La tasa media de actividad de las LÃridas es de 18 meteoros por hora, con una velocidad de 49 kilómetros por segundo durante varios dÃas. A pesar de ser una lluvia de meteoros «discreta», algunos años la tasa de actividad se incrementa a más de 100 meteoros por hora, pero es difÃcil predecir en que año se producirán estos «estallidos».
El número de meteoros observados por hora puede variar muy rápidamente según varÃa la densidad de fragmentos en la estela del cometa, por ello las predicciones concretas sobre número especÃfico de meteoros dependiendo del dÃa y la hora son difÃciles de realizar y suelen estar afectadas de una incertidumbre alta.
Para este 2018, la máxima actividad de la lluvia se espera que tenga lugar entre las 10.00 y las 21.00 horas (UTC) del dÃa 22 de abril, por lo que, si el tiempo no lo impide, la mejor noche para la observación deberÃa ser la del 22 al 23 de abril. El máximo visible en España se calcula que tendrá lugar a las 20.26 horas.
METEOROS DEL COMETA THATCHER
Los meteoros de las LÃridas son fragmentos del cometa C/1861 G1 (Thatcher), un cometa de largo periodo que orbita alrededor del Sol una vez cada 415 años. Como todos los años por estas fechas, la Tierra atraviesa un anillo poblado con fragmentos desprendidos del cometa Thatcher. Cuando uno de esos fragmentos (o meteoroides) entra en contacto con la atmósfera terrestre, se calcina por la fricción con el aire, creando asà el resplandor luminoso que se conoce como meteoro o estrella fugaz.
Las LÃridas se han observado durante los últimos 2.600 años y los registros más antiguos se conservan en el libro chino de crónicas Zuo Zhuan y datan del año 687 a.C.
Las lluvias de meteoros parecen tener un único centro de origen, un punto del que parecen surgir todas las estrellas fugaces. Ese punto se denomina «radiante» y su localización se utiliza para nombrar a la lluvia de estrellas. Asà pues, las LÃridas reciben su nombre porque tienen su radiante en la constelación de Lyra.
DÓNDE Y CÓMO OBSERVARLAS
Durante la noche del 22 al 23 de abril, la Luna se encontrará en fase de cuarto creciente, por lo que se ocultará pronto. Por tanto, la segunda parte de la noche será «ideal» para observar los meteoros que contrastarán en un cielo oscuro.
Según el Observatorio Astronómico Nacional, el lugar de observación de esta lluvia de estrellas puede ser «cualquiera» con tal de que proporcione un cielo oscuro.
En este sentido, recomienda observarlas desde un lugar que tenga pocos obstáculos para la vista (como edificios, árboles o montañas), y no utilizar instrumentos ópticos que limiten el campo de visión.
Aunque las LÃridas parecen venir de la constelación de Lyra, se pueden ver en cualquier parte del cielo. El OAN aconseja dirigir la mirada hacia las zonas más oscuras, en la dirección opuesta a la posición de la Luna si la observación se realiza antes de su ocaso.