Una operación conjunta de la Policía Nacional desarrollada por las Comisarías de Toledo y Ciudad Real ha conducido a la detención del cabecilla de un clan familiar especializado en la comisión de robos con fuerza en domicilios habitados por personas de edad avanzada. Los miembros de este clan no dudaban en acceder a viviendas, aunque sus moradores estuvieran dentro, ni en ejercer violencia sobre ellos en caso de ser preciso.
Las investigaciones comenzaron a finales del año pasado, cuando en la Comisaría de Ciudad Real se recibió la denuncia de un varón de 80 años que pudo ver cómo un desconocido de nacionalidad extranjera accedía a su domicilio por la ventana (previo escalo por la pared de un solar anexo), agrediéndole y abriendo la puerta para que una segunda persona pudiera entrar a través de esa vía.
ROBO CON EXTREMA VIOLENCIA
Los autores, que abofetearon repetidamente a la víctima, abandonaron la vivienda después de sustraer 20.000 euros que estaban guardados en un armario de un dormitorio, ha informado la Delegación del Gobierno en un comunicado.
Estos hechos se repitieron en dos ocasiones más, regresando los autores al mismo domicilio ante la creencia de que la víctima pudiera guardar más dinero en otras estancias de la vivienda.
A partir de ese momento los investigadores pudieron averiguar que los autores serían miembros de un clan familiar de nacionalidad extranjera asentado en la localidad de Malagón (Ciudad Real) y cuya principal actividad conocida sería la de ejercer la mendicidad por diferentes localidades de Toledo, Ciudad Real y Madrid, momentos que aprovecharían algunos de sus integrantes para captar información acerca de potenciales víctimas para los robos, preferentemente personas mayores que pudieran vivir solas.
La colaboración entre las Comisarías de Ciudad Real y Toledo, donde también se estaba investigando a las mismas personas por hechos de idénticas características cometidos en la capital castellano-manchega, condujeron a la realización de un registro domiciliario el pasado 29 de enero en Malagón, donde se detuvo al cabecilla del clan y se intervinieron diversos efectos.
El cabecilla del clan, a quien se le imputan cinco robos con fuerza (cuatro en Ciudad Real y un quinto en Toledo) fue puesto a disposición judicial, decretándose su ingreso en prisión provisional.
Las pesquisas continúan para tratar de localizar a otros dos miembros de este clan, uno de los cuales podría haber huido a su país para asegurar parte del botín conseguido en los robos. La operación ha sido realizada por agentes adscritos a la Comisarías provinciales de Ciudad Real y Toledo.
