Bolaños de Calatrava ha vivido este fin de semana una de sus celebraciones más queridas y esperadas: la Romería en honor a su patrona, la Santísima Virgen del Monte. Más de 25.000 personas se han dado cita en un evento cargado de fervor, tradición y emoción que ha convertido, un año más, al santuario de la Virgen en el epicentro espiritual y festivo de Castilla-La Mancha.
Entre los asistentes, la romería ha contado con la destacada presencia del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; el alcalde de Bolaños y presidente de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde; y el presidente de la Hermandad Virgen del Monte, Sacramento Fernández Montes, acompañados por numerosas autoridades políticas, civiles y militares. La jornada ha sido ejemplo de unión institucional y compromiso con una de las romerías más multitudinarias de la región.
El alcalde ha querido subrayar la magnitud y el valor cultural de esta celebración, que trasciende lo local para convertirse en un referente regional e incluso nacional. “La romería de la Virgen del Monte es, sin duda, una de las grandes de España. Una cita que habla de nuestras raíces, de la devoción de un pueblo y de la capacidad organizativa de una comunidad volcada en su patrona”, afirmó Valverde. También ha querido destacar y agradecer el impecable trabajo realizado por la Hermandad, el Ayuntamiento y los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad —Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil—, así como los servicios municipales y decenas de voluntarios, cuyo esfuerzo ha permitido que la celebración se desarrollara con absoluta normalidad, seguridad y alegría.
Durante todo el fin de semana se ha respirado emoción en cada rincón del recinto romero: repiques de campanas, solemnes vísperas, fuegos artificiales y un ambiente festivo y respetuoso a partes iguales han marcado una edición inolvidable. El domingo por la tarde se celebró uno de los momentos más esperados: la procesión de la Virgen del Monte y la tradicional subasta del LVIII Estadal de Oro, una medalla que porta la imagen y cuya puja alcanzó este año los 14.500 euros. Una cifra que rememora aquel primer Estadal de 1966 y su recordado precio de 3.000 pesetas en 1969, demostrando la intensidad del fervor que rodea a esta antiquísima costumbre.
Como es tradicional, la romería ha sido también un espacio de reencuentro y convivencia en torno a las viandas manchegas. Amigos, vecinos y familias, muchos venidos desde lejos, se han reunido en armonía, compartiendo los sabores de la tierra: cordero, suculentas gachas, panceta, chorizos a la brasa y una infinidad de manjares que forman parte del alma de esta celebración. El aire se llenó de aromas, risas y canciones, en una estampa viva de identidad manchega.
Para quienes no pudieron acudir en persona, ya fuera por enfermedad o distancia, todos los actos litúrgicos, incluida la emotiva procesión y la subasta, fueron retransmitidos en directo por el canal de Bolaños Digital en YouTube, acercando así la romería a hogares de todo el mundo y haciendo sentir a cada devoto, aunque lejos, más cerca que nunca de su Virgen del Monte.
Una romería que no solo se celebra: se vive, se siente y se recuerda. Bolaños ha vuelto a demostrar que la fe, la tradición y el calor del pueblo son capaces de reunir a miles de almas en torno a una misma devoción.
