PP y Vox han vuelto a escenificar su desacuerdo con el establecimiento de un canon del agua en Castilla-La Mancha, que consideran un «impuesto» con afán recaudatorio, mientras que desde el PSOE y el Gobierno regional han insistido en que esta es una tasa que procede de la Directiva Marco del Agua, que es de obligado cumplimiento y que otras regiones de España, entre ellas las gobernadas por estos dos partidos, ya la tienen activa.
Así lo han expresado todas las partes en el primer punto del orden del día del pleno de este jueves en las Cortes de Castilla-La Mancha. Un pleno que ha inaugurado, por parte de Vox, el parlamentario Francisco José Cobo, quien ha tildado el canon de «impuestazo disfrazado de tributo» que tiene a su juicio «consecuencias nefastas» en la economía tanto de las familias como de los sectores productivos.
Cobo ha insistido en un plan nacional del agua «que lleve agua en cantidad y calidad a todos los españoles mediante el interconexionado de cuencas, a modo de autopistas de distribución de agua». De igual modo, ha criticado que «no se construyen presas y embalses» a pesar de que «España necesita infraestructuras hídricas para asegurar el abastecimiento del agua y la consolidación y fomento del regadío».
Por ello, ha abogado por «la cooperación igualitaria de todos los territorios de España y la solidaridad para la búsqueda del equilibrio territorial en el desarrollo de un modelo responsable que bajo los principios de solidaridad, interés general y bien común garantice el abastecimiento de agua en todos los rincones de nuestra región y de nuestra nación».
PP CRITICA LA FALTA DE INVERSIONES
De su lado, el diputado del PP Santiago Lucas-Torres ha criticado que con el canon «el agua para beber sube por el nuevo impuesto de la Directiva Marco del Agua y el agua para regar sigue sin llegar por falta de inversiones», considerando que el Gobierno socialista «no realiza las inversiones que debe ejecutar, no exige las que les prometió el Gobierno de España y su reacción ha consistido en hacer pagar a los ciudadanos su falta de coraje y desidia».
«El impuesto al agua que vamos a pagar los castellanomanchegos es consecuencia de su nefasta gestión y de su afán por recaudar», ha afeado, reclamando que «retiren el impuesto del agua», ya que aún están «a tiempo» y considerando que Castilla-La Mancha necesita «un gobierno que escuche a sus ciudadanos y trabaje por el bien común».
En este sentido, ha realzado que el PP tiene su propuesta para este asunto, consistente en «eliminar el canon del agua y realizar las inversiones en las siete cuencas hidrográficas que necesitan que Castilla-La Mancha avance», asegurando que su partido ha «trabajado arduamente para asegurar asignaciones y reservas adecuadas».
PSOE REPROCHA A PP QUE SU PLAN «PIVOTA» SOBRE EL TRASVASE
Por su parte, el diputado socialista Francisco José Barato ha insistido en que este canon «es una obligación» que viene de la Unión Europea y ha recordado que «la práctica totalidad de las comunidades lo tienen ya implantado desde hace años», siendo Castilla-La Mancha «una de las últimas que lo ha puesto en marcha» y además la región que «va a aplicar el canon más bajo de España».
Barato ha reprochado al PP que incumple el Pacto Regional del Agua «cada vez que callan cuando su partido, a nivel nacional, se posiciona con el Levante en contra de los intereses de Castilla-La Mancha y, por tanto, en contra de lo firmado en ese Pacto por el Agua».
«Estoy de acuerdo en eso que dicen, que ustedes dicen lo mismo –en todas las regiones–, pero no se lo tome como un halago, porque no aportan nada más allá de la obviedad como solución, que haya agua para todos. Presumen de que dicen lo mismo en Murcia, en Valencia y en otros lugares y es que ese es precisamente el problema, que cuando hablamos de ese pacto nacional del agua que piden, en todos esos sitios lo que están pidiendo es que haya un pacto nacional por el agua que pivote sobre el Trasvase Tajo-Segura», ha respondido a Lucas-Torres.
CUMPLIR LAS DIRECTIVAS EUROPEAS
El debate ha sido cerrado por la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, que ha insistido en que las directivas comunitarias, como la que impone la puesta en marcha del canon del agua, «nos gusten más o menos, no solo hay que cumplirlas, sino que hay que intentar adaptarlas a las necesidades que tengamos».
Gómez ha recordado que la Directiva Marco del Agua establece puntos como que «se tiene que mantener en todo caso el buen estado de las masas de agua», además de conceptos como que «quien contamina paga», preceptos que son «fundamentales».
De igual modo, ha enfatizado que «los ríos tienen que discurrir por donde tienen que discurrir y llevar el agua en cantidad y calidad necesaria», ya que el buen estado de las masas de agua «es lo que nos permite contar con agua para los usos necesarios del desarrollo socioeconómico».
La consejera también ha aseverado que «no podemos hacer demagogia con el coste del agua». «No es gratis, una infraestructura hidráulica no es gratis», ha insistido, por lo que ha defendido «la premisa de que hay que recuperar los costes».
La consejera también ha coincidido con el socialista Francisco José Barato en que «el canon medioambiental, de una forma u otra, ya existe en todo el territorio nacional y somos de los últimos que lo ponemos encima de la mesa, y lo ponemos además con unas medidas sociales fundamentales para evitar que esto cueste mucho más a los ciudadanos». «Pero es que el agua cuesta, es que tenemos que hacer nuestro ejercicio como ciudadanos de que tenemos que ser responsables en su uso y es para eso para lo que creamos este canon», ha apostillado.
RESOLUCIONES
Al final del debate, cada uno de los tres grupos parlamentarios ha presentado sus resoluciones. Así, la de Vox, que ha sido rechazada por la mayoría socialista y tampoco ha contado con la aprobación del PP, que se ha abstenido, pide la derogación del canon del agua, de la misma manera que insta al Gobierno regional a instar a su vez al regional a la aplicación de un nuevo plan nacional de agua que, «bajo los principios de solidaridad y bien común», garantice el abastecimiento de agua a todos los rincones de la región, así como insta a poner fin a la «guerra del agua en tres regiones» y a combatir con efectividad los episodios de sequía y riadas mediante la interconexión de cuencas.
Mientras, el documento presentado por el PP, también rechazado por el PSOE y que ha contado con el único voto a favor de los ‘populares’, reclama también la derogación «inmediata» del canon por ser «un impuesto al agua que incrementa su precio y resulta especialmente lesivo para las familias y las empresas», así como otras medidas como propugnar el mantenimiento «irrenunciable» del principio de prioridad de la cuenca cedente como premisa básica de la solidaridad entre regiones, acometer y desarrollar la regularización de pozos de explotaciones prioritarias en el Alto Guadiana, realizar la conexión entre los embalses de Alcorlo y Beleña o solicitar que los planes hidrológicos contemplen las medidas necesarias para generar una reserva de recursos con destino al mantenimiento de caudales ecológicos.
Finalmente, la resolución socialista, única aprobada con los votos a favor del PSOE, en contra de Vox y la abstención del PP, insta al Gobierno regional a pedir al Gobierno central seguir adaptando las políticas de agua de acuerdo a la Directiva Marco del Agua, solicitando también al Ejecutivo autonómico que siga persiguiendo la preservación del medioambiente y el cuidado de los ríos, velar por el cumplimiento de las sentencias que avalan al establecimiento de los caudales ecológicos del Tajo y seguir invirtiendo en infraestructuras para un uso eficiente del agua.