Las protestas de agricultores en Castilla-La Mancha han vuelto a provocar este jueves el corte de numerosas vías y carreteras de la región, siete en total, concentrándose con especial beligerancia en la provincia de Albacete, a la que corresponde seis de las vías con bloqueos.
Según han transmitido fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT), las movilizaciones han causado la interrupción del tráfico en varias autovías. Concretamente la A-30, a su paso por Hellín, permanece cortada en ambos sentidos, al igual que la A-43, a la altura de Villarrobledo, y la A-31, en Bonete y La Gineta.
Asimismo, los tractores han paralizado el tráfico en la N-322, en el término municipal de Alborea; la N-310, en Villarrobledo, y la N-430 a la altura de Barrax.
Fuera de la provincia de Albacete, tan solo se ha registrado la interrupción del tráfico en la A-3, a su paso por Minglanilla, en la provincia de Cuenca.
200 tractores colapsan las calles de Ciudad Real
Alrededor de 400 agricultores de la provincia de Ciudad Real han colapsado las calles de la capital provincial con sus, aproximadamente, 200 tractores tras una marcha lenta convocada por Asaja, UPA, COAG y Cooperativas Agro-alimentarias en protesta por la «crítica situación que atraviesa el sector agropecuario» y para reivindicar un plan de choque ambicioso a nivel europeo, nacional y autonómico.
La marcha, que ha comenzado pasadas las 11.00 horas en la Puerta de Toledo de Ciudad Real ante un gran despliegue policial ha recorrido la ronda de la capital provincial hasta llegar a la sede de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, donde los convocantes han derramado más de 25.000 litros de vino francés mal fermentado a las puertas del organismo de cuenca.
Tras derramar los 25.000 litros de vino francés en la Confederación Hidrográfica del Guadiana, la marcha ha continuado su recorrido por las calles de la capital provincial para poner punto y final a la marcha a las puertas de la Subdelegación del Gobierno en la provincia de Ciudad Real, donde los representantes de las organizaciones agrarias han ofrecido unas palabras a los manifestantes que han llegado a pie hasta el lugar.
Allí, representantes de Asaja, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias han solicitado una simplificación de la «gran carga burocrática» a la que están sometidos los agricultores y ganaderos; revisar la PAC para que se ajuste a la realidad del campo, así como una Ley de la Cadena Alimentaria que «realmente prohíba las prácticas desleales y que los precios de los productos de los profesionales del campo cubran los costes de producción».
La manifestación ha transcurrido sin incidencias reseñables, salvo un momento de tensión que se ha vivido en la calle Alarcos, donde la Policía Nacional ha tenido que intervenir entre los manifestantes, entre ellos el hijo del presidente nacional de Asaja, Pedro Barato, cuando un tractor trataba de dirigirse hacia las calles del centro de la ciudad.
Los agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional, desplazados desde Madrid, han impedido que los tractores llegaran a las puertas de la Subdelegación del Gobierno y que éstos transitaran únicamente por las rondas de la capital.
El presidente nacional de Asaja, en declaraciones a los medios de comunicación, ha pedido a las instituciones europeas que «dejen de perderle el respeto a agricultores y ganaderos», con la aplicación de «leyes y planteamientos absurdos». También ha dicho que «dejen de tocar las narices con historias raras difíciles de cumplir», en referencia a la aplicación del Cuaderno de Campo Digital, «cuando hay en muchas zonas rurales que no tenemos ni cobertura en los móviles».
Respecto a la Política Agraria Común (PAC), Barato ha lamentado que le «falten» 1.000 millones de euros al año y que «complique la vida a los agricultores», pues la burocracia «hace que los agricultores tengan más papeles en su casa que un notario».
Según el presidente nacional de ASAJA, los ministros de Agricultura de la Unión Europea «son cómplices» de esta situación y ha criticado que se desdigan en sus decisiones. «Lo que hace tres años no se podía hacer en la PAC ahora sí se puede», ha añadido.
Finalmente y respecto a la problemática del agua, Barato ha reclamado más presupuesto para acometer infraestructuras hidráulicas necesarias «de una forma decidida», con el objetivo de que «en ninguna parte del país se pase sed ni tampoco se deje de regar». Para el representante de ASAJA, el Gobierno debería de tomar medidas urgentes para derivar el agua desde el norte de España, «donde hay excedente de agua», a otras zonas en las que «se está pasando sed».
Desde UPA, su secretario general, Julián Morcillo, tras las manifestaciones de agricultores y ganaderos de los últimos días, ha reclamado «una respuesta» por parte de las administraciones europeas, nacionales y autonómicas.
Asimismo, Morcillo ha criticado que haya «ciertos partidos políticos» que estén aprovechando el malestar de los agricultores y ganaderos para hacer política.
Por su parte, el vicepresidente de Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha, Julio Bacete, ha señalado que «sin agua no podemos vivir», por lo que ha pedido que las Administraciones estudien las masas de agua de subterránea para poder ser utilizada. En este sentido, ha destacado que los agricultores no malgastan agua, sino que la «utilizan responsablemente para producir alimentos de calidad y a unos precios razonables».