La Policía Nacional ha confirmado a la familia que los nuevos restos hallados este fin de semana en el vertedero Ecoparque de Toledo, en concreto el torso y los brazos, pertenecen a Ángel, el niño de 11 años desaparecido junto a su primo Fernando el pasado 10 de diciembre en Madrid.
Fuentes cercanas al caso han indicado que a última hora de la tarde de este domingo la Policía comunicó a los padres del menor dichos resultados tras las pruebas de identificación realizadas a los restos, que fueron descubiertos durante la jornada de rastreo del sábado en la zona de búsqueda acotada en el vertedero.
El hallazgo de nuevas partes del cuerpo de Ángel, del que ya se encontró un pie, permitirá a los forenses someterlos a unos análisis que podrían aportar datos sobre las circunstancias en las que murió.
La autopsia al cadáver de su primo Fernando, descubierto en el mismo Ecoparque de Toledo el día 15 de diciembre, reveló que no presentaba signos de violencia y que falleció a causa de una asfixia no mecánica o manual. Es decir, no se observaron indicios de criminalidad.
Sin embargo, los investigadores mantienen varias hipótesis abiertas, entre las que barajan desde una muerte accidental de los menores hasta un posible homicidio.
El pasado 10 de diciembre, Ángel y Fernando viajaron de forma voluntaria desde el barrio madrileño de Carabanchel hasta Toledo, donde el mayor de los primos pretendía encontrarse con una expareja.
La familia de esa joven ha sido investigada por la Policía, pero por el momento no se han producido detenciones.