La ministra de Sanidad, Mónica García, se ha mostrado abierta a incluir a los parados y a las personas mayores de 65 años en el Plan de Salud Bucodental, que hasta ahora incluye a embarazadas, niños de hasta 14 años, pacientes de cáncer de cabeza y cuello, adultos con discapacidad intelectual y personas con enfermedades neuromusculares.
«Como ahora mismo la salud bucodental, dentro de la sanidad pública, es una cosa más bien pírrica, lo que queremos es que sea parte importante de la cartera de servicios. El otro día hablaba de los mayores de 65 años, pero también puedo hablar de los parados o de las personas que son más vulnerables», ha apostillado García, en unas declaraciones a medios realizadas este lunes, antes de un desayuno informativo que ha tenido lugar en el Ateneo de Madrid con el secretario general de CCOO, Unai Sordo.
Preguntada sobre salud mental, García ha apostado por un acuerdo «con otros ministerios» para abordar la influencia de los determinantes sociales en este aspecto. «Hay que cuidar que no haya desigualdad, que haya buenos trabajos, y hay que cuidar la juventud. Es un abordaje multidisciplinar para cuidar la salud mental, así que tendremos que ponernos de acuerdo con otros ministerios y con la sociedad para decir que tenemos un problema de salud mental y hay que abordarlo desde muchos sitios», ha expresado.
Asimismo, también ha insistido en su compromiso con «ensanchar» la sanidad pública, «con hacerla más accesible, más atrayente y más universal». En este sentido, ha reiterado que sus prioridades son «la universalidad, que se perdió en el año 2012, reforzar la Atención Primaria, que está herida de muerte y que es uno de los sustentos del SNS, y cuidar a los profesionales». «Esas son mis tres prioridades ahora, cuando estoy en el Gobierno», ha asegurado.