Ăngeles BĂ©jar, la madre del suspendido presidente de la Real FederaciĂłn Española de FĂștbol (RFEF), ha pasado su primera noche en la parroquia de la Divina Pastora, en el centro de Motril, en la costa de Granada, donde este pasado lunes por la mañana iniciaba una huelga de hambre indefinida en apoyo a su hijo tras justificar su beso con Jennifer Hermoso asegurando que sĂ fue consentido.
La madre, aunque dĂ©bil y en estado de ‘shock’, se encuentra en buen estado, y acompañada de una hermana, con la que ha pasado la primera noche, segĂșn fuentes cercanas consultadas por Europa Press. Son numerosos los periodistas que siguen el caso a las puertas de la parroquia del barrio de Capuchinos, cerrada en la mañana de este martes, y adonde tambiĂ©n se siguen acercando curiosos.
Todo ello despuĂ©s de que unos 200 vecinos de Motril se concentraran en la tarde de este pasado lunes en apoyo a Luis Rubiales, con vecinas mostrando carteles como ‘Stop cacerĂa contra Rubiales’ o ‘Jenni, Âżpor quĂ© no dices la verdad?’. HabĂa sido convocada por un grupo de apoyo a Luis Rubiales y distribuida a travĂ©s de redes sociales, desde el «respeto absoluto», señalaban estos mensajes, a quienes piensan diferente.
La PolicĂa Local de Motril cortĂł al inicio de la concentraciĂłn, a partir de las 18,00 horas, la calle del barrio de Capuchinos donde estĂĄ la iglesia, adonde tambiĂ©n acudieron vecinos que defienden la postura de Hermoso, sin incidentes. Por la mañana, varias familiares acompañaron a BĂ©jar, introduciendo para ella botellas de agua con los que sobrellevar la huelga de hambre.