La Guardia Civil de Cádiz ha detenido en el municipio gaditano de Barbate a uno de los ladrones más activos de la provincia, un hombre de 29 años de edad y natural de San Fernando que contaba 15 requisitorias judiciales, de las que diez de ellas eran de búsqueda para su detención e ingreso en prisión por todo tipo de causas enjuiciadas en tribunales de media España.
El detenido era buscado por las Fuerzas de Seguridad de la provincia de Cádiz y de otras más alejadas como Zamora o Albacete, por delitos cometidos contra el patrimonio, personas o funcionarios públicos.
La detención se ha producido en el marco de la operación denominada ‘Confido’, siendo esta persona presunto autor de delitos de hurto, robos con violencia o intimidación, extorsión, usurpación de estado civil, entre otros, según ha indicado la Guardia Civil en una nota.
El detenido estaba especializado en todo tipo de delitos contra el patrimonio, sobre todo en utilizar la documentación de los vehículos que robaba para cometer estafas, suplantar identidades o extorsionar a las víctimas de los robos que cometía, no dudando en emplear la violencia o la intimidación caso de ser descubierto. El dinero que obtenía de la venta de lo robado lo invertía en criptomonedas como forma de dificultar el acceso a su patrimonio obtenido de manera ilícita.
Los hechos tuvieron lugar cuando los guardias civiles del Área de Investigación de Barbate tuvieron conocimiento de una serie de robos de vehículos, cometidos en la zona de la Janda. Todos ellos presentaban elementos comunes y habrían sido cometidos por una o varias personas con cierto nivel de profesionalización en su comisión.
Los hechos se vieron agravados al conocerse que en varias ocasiones los propietarios habían sorprendido in fraganti al autor y que éste había empleado la violencia o la coacción para consumar el robo, comunicándose incluso con su víctima con posterioridad para disuadirlo de que presentara una denuncia o diera datos que permitieran a los agentes su identificación.
La investigación permitió determinar que se trataría de un joven de San Fernando muy activo en el mundo delincuencial que era buscado por las Fuerzas de Seguridad de la provincia de Cádiz y de otras más alejadas como Zamora o Albacete, por delitos cometidos contra el patrimonio, personas o funcionarios públicos.
En el transcurso de sus pesquisas los guardias civiles determinaron que el sospechoso había utilizado la identidad de una de sus víctimas para obtener líneas telefónicas con las que extorsionar a más personas. Según la investigación, el presunto autor residía en un complejo rural de la zona, donde había establecido su base de operaciones y cuyos responsables no habían informado a las autoridades del registro de viajeros, ya fuese por iniciativa propia, por una contraprestación económica o por dejadez de sus obligaciones.
También se determinó que tras cometer sus numerosos robos, vendía su botín a terceras personas, exigiendo que el pago se realizase en criptomonedas con la intención de dificultar a los investigadores el acceso a su patrimonio en caso de ser detenido.
En la mañana del pasado 17 de noviembre, los guardias civiles del Área de Investigación de Barbate se citaron con el sospechoso fingiendo que iban a comprarle material robado que estaba en su poder. Fue entonces cuando procedieron a su detención a pesar de que utilizaba documentación perteneciente a una de sus víctimas. Tras la comprobación de su verdadera identidad, M.E.G.G. natural de San Fernando y de 29 años de edad, fue puesto a disposición judicial, quien decreto su ingreso en prisión.
La Guardia Civil ha explicado que la operación ‘Confido’ continúa abierta ya que se continúa recuperando vehículos y material robado en numerosas localidades de la provincia de Cádiz. Además, se va a imputar un delito de receptación a los compradores que, a sabiendas, se hicieron con el material robado.