El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha realizará la prueba del talón a los niños de menos de un año que lleguen a la región huyendo de la guerra «despiadada» que está sufriendo la población de Ucrania.
Así lo ha avanzado el presidente autonómico, Emiliano García-Page, durante su intervención en el acto de colocación de la primera piedra del nuevo hospital de Puertollano, donde tras recordar que en Castilla-La Mancha es la región donde más enfermedades se rastrean, un total de 25, ha dicho que el Gobierno regional ha tomado esta decisión porque estos refugiados que están llegando «son personas como los demás», manifestación que ha arrancado un gran aplauso entre los asistentes.
Y es que García-Page se ha mostrado orgulloso de gran solidaridad del país, que está haciendo un «esfuerzo ímprobo para acoger a la gente de la guerra despiadada de Ucrania».
«Podríamos amontonarlos o acogerlos, que son cosas distintas. No se trata de que vengan 100.0000 o 200.000, sino de que cuando estén aquí, terminen teniendo nuestro mismo nivel de vida», ha dicho el presidente de Castilla-La Mancha, que ha arrancado este acto lamentado dicha guerra «despiadada», que ha llegado a tildar de «genocidio».