Como t铆tulo, cojo prestada esta fabulosa combinaci贸n de palabras, a uno de los economistas m谩s admirados por mi persona, Jos茅 Antonio Herce San Miguel (obviamente cuento con su permiso expreso), sin otro 谩nimo que reflexionar sobre el paso cambiado que, a todos, nos coge, tarde o temprano.
驴Qui茅n (a estas alturas de la vida) no ha sentido alguna vez que sus derechos les han sido confiscados? No se me pongan de perfil. Quien m谩s, quien menos, lo ha experimentado. Cierto que hay diferencias, pues existen ciudadanos m谩s conformistas y otros m谩s beligerantes. Tambi茅n est谩n los que, por pereza o despiste, no se enteran de mucho y, por tanto, tienen menos oportunidades para denunciar agravios. Por 煤ltimo, no olvidemos a los devorados por el hartazgo, a los que, ya, les da todo igual.
驴Por qu茅 no comenzar por el caso de unos hijos que heredan el patrimonio familiar tras un cambio normativo, vi茅ndose obligados a liquidar las propiedades para saldar cuentas con el fisco? 驴Qu茅 me dicen del inversor que, horas antes de retirar las ganancias de sus fondos de inversi贸n para atender un grave imprevisto, ve c贸mo una s煤bita pandemia devora sus rentabilidades, cuidadas durante a帽os? 驴Y de aquel concursante que, de manera meritoria, obtiene un premio extraordinario justo en el momento en el que la sociedad pone el foco en la corresponsabilidad fiscal? Miren, por poner otro ejemplo, el caso de Elena, que aspiraba a opositora, mientras cambiaban los decretos de acceso a la funci贸n p煤blica, bloqueando las listas de interinidad y socavando el principio de m茅rito y capacidad.
Y si no esta chica de m谩s arriba, la del n煤mero 2, mexicana y asistenta a domicilio, ingeniera con t铆tulo no homologado, interna 24 horas sin dar de alta y con menos del SMI como tributo a su labor de cuidados. Menci贸n expresa merecen los que llegaron tarde al confinamiento y este a帽o ya no tuvieron un pase gratis al siguiente curso. Doblemente da帽ino para ellos, pues el a帽o que viene parece que no estar谩 de moda repetir, pero este s铆. 驴Recuerdan las calefacciones el茅ctricas? S铆, esas que, para cuando fueron a usarlas, ya hab铆an eliminado las tarifas nocturnas. Esto 煤ltimo puede hilarse con la fiebre de los veh铆culos el茅ctricos. Pobrecitos los sufridos due帽os, que vivir谩n con la incertidumbre asociada al tipo de generaci贸n el茅ctrica que requieran para recargar sus flamantes autom贸viles.
A veces, los derechos los confisca, simplemente, la posici贸n relativa de uno en el tiempo. De eso sabemos mucho, pues ya jug谩bamos a la silla de bien peque帽os. Hay que estar atento y sincronizar nuestra vida con las normas… 隆y las 茅pocas! F铆jense, por nombrar un 煤ltimo caso. Hubo quien, en aquellos remotos tiempos, cotiz贸 los 煤ltimos dos a帽os de trabajo y su pensi贸n de jubilaci贸n se calcul贸 sobre los mismos. Luego, pasaron a ocho (y a quince, y a veinticinco). Y ahora, miren ustedes, se estudia aumentar las bases de cotizaci贸n m谩s altas, sin que ello otorgue derecho a cobrar una pensi贸n mayor 隆Qu茅 hermoso caso de confiscaci贸n de derechos!
鈥斅ueno, pero eso es a los ricos! 隆Que se jodan que para eso ganan!
Pues de eso hablamos. De joderse y, si es los unos a los otros, mejor. El caso, amigos, es que de eso no nos libramos ninguno 驴Por qu茅 ser谩?