Ante los recientes acontecimientos de carácter político ocurridos en España y que en mayor o menor medida afectan a la Guardia Civil, desde JUCIL nos vemos en el deber de hacernos oír:
Por un lado, dirigirnos a usted recientemente elegido presidente del gobierno.
En un momento de su intervención en la tribuna de oradores del Congreso en días recientes, llegó a manifestar sin ruborizarse que la derrota de la banda terrorista ETA fue obra del PSOE, con el ex presidente Zapatero y el ministro Rubalcaba a la cabeza. Como miembros de la Guardia Civil hemos de salir en defensa de tantos hombres y mujeres, compañeros nuestros que dieron lo mejor de sí, muchos hasta su propia vida, luchando por la libertad contra los asesinos de ETA. En su afirmación Sr. Sánchez hay dos imprecisiones.
La primera es que ETA, no ha sido derrotada del todo, sus defensores están hoy en nuestras instituciones y usted se sienta a negociar el futuro de todos los españoles de tú a tú con quienes tienen las manos manchadas de sangre. Recordarle que todavía hay 300 asesinatos sin resolver.
La segunda es que la derrota del aparato de asesinos de la banda, vino de la mano de la Guardia Civil, la Policía Nacional y los Servicios de Inteligencia, bajo el paraguas del Estado de Derecho y el mandato Constitucional del pueblo español. No se arrojen méritos de los que carecen. Desde JUCIL no vamos a permitir que nadie le quite el valor de su sacrificio a nuestros compañeros caídos.
Por otra parte, manifestar nuestro absoluto rechazo a la reciente firma por su parte Sr. Sánchez de la cesión de competencias en materia de tráfico y seguridad vial a la Comunidad de Navarra dirigida por el PSOE, el hoy gobierno de la Nación ha decidido que, en el plazo de los seis primeros meses de 2020, la guardia civil de tráfico sea expulsada de esa Comunidad.
La Seguridad del Estado y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del mismo, jamás deben ser moneda de cambio por sillones y cuotas de poder político. Ello no es solo una irresponsabilidad, sino también un golpe en la línea de flotación de la integridad de la Nación Española.
Mas preocupante si cabe es esta decisión cuando la petición de expulsión de dichos guardias civiles viene promovida por el PNV, el cual carece de representación en Navarra. Detrás de esto está la perversa dinámica del nacionalismo y su falso victimismo. El nacionalismo necesita siempre un enemigo, busca la fragmentación para poder controlar lo pequeño. Para ellos el principal enemigo es la Guardia Civil como institución de carácter nacional, garante del Estado de Derecho y de las libertades de nuestros compatriotas que lleva a cabo su labor desde hace 175 años. La Guardia Civil por algo es la institución más valorada por los españoles año tras año. Pero la culpa no es del PNV, la responsabilidad es de quien es capaz de intercambiar a los hombres y mujeres de uniforme a cambio del alquiler de La Moncloa por un poco más de tiempo. Lo primero que desaparecerá si se vende a la Guardia Civil en Navarra es el respeto y la voracidad independentista se presentará como virtud.
Los abusos sobre tan fieles servidores públicos que con tanto honor se han conducido siempre en defensa del Estado de Derecho y el Orden Constitucional parecen no tener fin. Las mujeres y hombres de uniforme somos ciudadanos que voluntariamente asumimos más deberes que derechos, “capaces de dar cosas que nadie obliga y abstenernos de cosas que nadie prohíbe”, en beneficio de la libertad y el Estado de Derecho.
Usted Sr. Sánchez, dispone de la vida y el futuro, no ya de los propios componentes del cuerpo, sino también de sus familias. Familias asentadas en esa región, con hijos navarros, a los que por ser sus padres servidores públicos les van a obligar a dejar su vida atrás. No en beneficio del bien común del pueblo español sino en beneficio propio de su persona.
Nosotros, con nuestro trabajo diario, incluso a nivel internacional reforzamos el papel y la imagen del pueblo español, “reforzamos la libertad”. Sin embargo, vemos como recursos sin fin se destinan a otro tipo de representaciones exteriores que socavan nuestro Estado de Derecho. Mientras desde la Moncloa promete y vuelve a prometer la tan ansiada Equiparación Salarial. Cumpla su palabra de una vez por todas, llevamos treinta años esperándola, en su mano está la Equiparación Salarial con las policías autonómicas ha de ser Total, Real y Absoluta. Es de Justicia, es de Igualdad.
Desde la unión surgida entre Policías Nacionales y Guardias Civiles a través de JUSAPOL no vamos a tolerar ni un abuso más sobre ningún miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Por ello exigimos la dimisión inmediata tanto del ministro del Interior en funciones D. Fernando Grande Marlaska, como del Director General de la Guardia Civil D. Félix Azón. Lo que parece ser una más que sobrada dejadez e incompetencia de estos, en lugar de defender a aquellos a los que desde sus cargos representan y que tan fielmente sirven a la Democracia española.
Informarle que JUCIL ha solicitado formalmente ante la Delegación de Gobierno en Navarra permiso para realizar una concentración de protesta que tendrá lugar el próximo día 8 de febrero en Pamplona, a las 12 de la mañana, en la plaza de las Merindades s/n , frente a la Delegación del Gobierno de Navarra. Invitando desde estas líneas a todas las mujeres y hombres de la Policía y la Guardia Civil, a sus asociaciones y sindicatos, así como a todos los ciudadanos e instituciones para que nos acompañen en la defensa de nuestros derechos irrenunciables con un grito de Justicia, Dignidad e Igualdad, frente a la ignominia que están a punto de cometer contra la Guardia Civil. Hoy es la Guardia Civil de Tráfico, y mañana será el resto de componentes. Sin la Guardia Civil en Navarra, España será un poco más débil.
Desde aquí le decimos alto y claro que estamos hartos de ser ninguneados y utilizados como moneda de cambio. Haremos todo lo que legalmente sea posible para no permitir que mientras el discurso político se llena de “progreso”, se sigan manteniendo estos ataques bajo un gobierno que dice llamarse europeo a la vez que pisotea los derechos de quienes hasta con su propia vida garantizan la libertad y seguridad de los españoles, siendo con ello un pilar fundamental del desarrollo y bienestar de nuestro país. La Guardia Civil es un reflejo de la moderna sociedad española, capaz y solidaria.
Como no podía ser de otra manera recordarle que son normas básicas para todos los guardias civiles garantizar la soberanía y defensa de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional.
JUCIL
Asociación Profesional de la Guardia Civil
Justicia Guardia Civil