Una avería en los depósitos de combustible del Centro de Salud de la localidad de El Casar (Guadalajara), que ya ha sido puesta en conocimiento de los servicios del Sescam para su reparación, ha ocasionado la fuga de una pequeña cantidad de gasoil que ha motivado a su vez algunas quejas de vecinos de esta localidad campiñera por fuertes olores procedentes del alcantarillado de la localidad, sin que se haya visto afectada en ningún momento la red de abastecimiento.
El teniente de alcalde y concejal del área de Seguridad, Javier Bule, ha confirmado que en ningún momento ha peligrado la salud de los vecinos del municipio, que pueden consumir agua sin problemas, ya que no parece que la fuga de gasoil haya sido mucha, además de que ha ido directamente a las canalizaciones de las alcantarillas y no a la red de abastecimiento.
No obstante, ha reconocido que sí podría estar afectando a las personas que sean especialmente sensibles con los olores, lo que podría ocasionarles algunos mareos.
En todo caso, Bule ha aclarado que el servicio del Sescam ya tiene conocimiento de los hechos con el fin de que lo antes posible se proceda a actuar y ha señalado que cuando sea reparada la avería, los servicios municipales procederán a la limpieza de las canalizaciones.
Según Bule, las quejas parten de la pasada semana, y más concretamente desde el sábado, desde cuando están recibiendo las llamadas de algunos vecinos alertando de que percibían un olor «químico» fuerte por las cañerías en una zona concreta del municipio situada en las inmediaciones del ambulatorio y el cuartel de la Guardia Civil.
Este hecho motivó a su vez que la Policía Local y técnicos municipales iniciaran una investigación a instancias del Ayuntamiento y, aunque aún no se conoce cuál puede ser el problema, se sospecha que el origen puede estar en una avería en el depósito del centro de salud de la localidad, afectando a la red de alcantarillado.
Tras hablar con responsables de la depuradora de aguas para ver de qué tipo de residuos se podrían tratar, según Bule, ellos mismos les confirmaron que se trataba de algún tipo de hidrocarburo, y una vez acotada la zona y después de subir a la parte más alta en la que se detectó el olor, ha dicho que verificaron que el fallo parece estar en la rotura del depósito de la caldera de gasoil mientras se procedía a su sustitución. «Tenía una fuga que iba a parar al desagüe», ha dicho.
Según Bule, es posible que la fuga ya esté solucionada porque no han recibido más quejas, pero ha precisado que, en todo caso, se ha puesto en contacto con los servicios municipales para que «lancen» agua a presión por las alcantarillas de la zona alta para que, si quedaba algún residuo, se elimine «cuanto antes».
El teniente de alcalde ha insistido en que al detectarse estos fuertes olores en la canalización del alcantarillado, en ningún momento ha afectado al agua de consumo porque «son dos redes totalmente independientes», por lo que ha apuntado que «para nada ha peligrado la salubridad de las personas».