La implementación en Castilla-La Mancha a la app Radar Covid y poder aumentar la vigilancia a las personas que se encuentran en aislamiento son dos de las acciones en las que está trabajando el Gobierno regional para intentar frenar la pandemia.
Asà lo ha manifestado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, a pregunta de los medios durante su visita este sábado al aula de simulación del Hospital de Ciudad Real, donde ha previsto que en las próximas dos semanas pueden materializarse ambas medidas.
Respecto a la aplicación de rastreo, el consejero ha explicado que en las últimas pruebas aún estaba dando algunos fallos de conexión con sus sistemas. «Hasta que todo no funcione bien no invitaremos a la ciudadanÃa a que se la bajen».
Por otro lado, ha explicado que están a la espera de los servicios jurÃdicos de la Junta y el visto bueno judicial para ir un paso más en la vigilancia de los personas que tienen que mantener aislamiento domiciliario pudiendo facilitar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y la PolicÃa Local la identidad de estas personas.
Ha vaticinado que en unas dos semanas podrÃa hacerse si se consigue el visto bueno judicial, ya que hay que salvar la Ley de Protección de Datos.
TENDENCIA A LA ESTABILIDAD
El consejero también ha querido hacer una valoración sobre la evolución de la pandemia en la región cuyos datos de los últimos dÃas hacen pensar en una tendencia hacia la estabilización, según sus palabras, ya que se mantienen en una horquilla de entre 500 y 600 casos diarios.
El titular de Sanidad ha resaltado la cifra de hospitalizados, sobre unos 400, que aún se encuentra en un volumen «razonable» y que el número de fallecidos sigue a la baja. En este sentido, ha apuntado que en hospitalización –donde hay sobre un 10%–, están en la media del paÃs, mientras que en ingreso en UCI, con unos 40 en los últimos datos recogidos, un poco por debajo.
En este sentido, ha hecho una llamada a la responsabilidad y a limitar los encuentros sociales ante el aumento de casos registrados entre finales de agosto y principios de septiembre con la vuelta a la rutina. «Algo normal porque la sociedad se tiene que mover», ha explicado, añadiendo que esto desde el punto de vista de la salud pública es un acelerador que se está intentando contener, recordando a quienes no están siendo cuidadosos con las restricciones.
VUELTA AL COLE
De otro lado, ha asegurado que los servicios sanitarios están preparados ante un posible aumento de los casos provocado por la vuelta a las clases. A preguntas de los medios, ha insistido en la estrecha colaboración entre Sanidad y Educación para «conseguir una normalidad lo más adecuada posible».
Finalmente, se ha referido a varias publicaciones cientÃficas que concluyen que los niños tienen una capacidad de contagio algo menor que los adultos.