El Gobierno de Castilla-La Mancha ha intensificado la promoción de la artesanía de la región tras el aplazamiento de la celebración de la 40 edición de Farcama a causa de la crisis sanitaria y ha celebrado una misión comercial internacional que ha puesto en contacto a artesanos de la región con compradores y propietarios de tiendas de museos de Estados Unidos, como parte del programa internacional de compradores que se desarrolla habitualmente con motivo de la Feria de Artesanía de Castilla-La Mancha.
Este programa, impulsado por el Instituto de Promoción Exterior de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo, supone siempre la llegada a la Feria de Artesanía regional de compradores internacionales, que entran en contacto directo con los artesanos expositores de Farcama. Desde hace años, el IPEX organiza durante Farcama ese programa de compradores internacionales, en el que se invita a compradores de tiendas de museos de Estados Unidos a visitar la feria de artesanía de referencia y conocer de primera mano la oferta regional, según ha informado la Junta en nota de prensa.
En septiembre, el IPEX lanzó invitación a los artesanos de la región para participar en un programa de acercamiento de la oferta artesana castellanomanchega a compradores de tiendas de museos de Estados Unidos. Se realizó un catálogo digital con los artesanos que desearon participar, que la Antena Exterior de Nueva York de IPEX difundió entre compradores de tiendas de museos del país norteamericano, invitándoles a solicitar reunión virtual con los artesanos que les interesaba conocer.
A lo largo del mes de octubre y noviembre, se realizaron un total de 25 reuniones virtuales con 14 artesanos de la región, que presentaron sus productos y la calidad de sus elaboraciones a compradores norteamericanos. El objetivo principal fue el acercar a los compradores de tiendas de museos a las artesanías de la región y apoyar las relaciones comerciales entre compradores y artesanos a través de un formato virtual que permite a los artesanos presentar y exponer su trabajo a los compradores. Los compradores de los museos tuvieron así la oportunidad de seleccionar de un catálogo de 21 artesanos, a aquellos con producciones de su interés.
